La delegada del Gobierno en Extremadura, Carmen Pereira, informa que el conductor detenido ayer por la Guardia Civil cuando circulaba a 248 kilómetros por hora por la N-V, a la altura del kilómetro 309, ha sido acusado de un delito de conducción temeraria por poner en peligro la vida de dos menores.

Según la agencia Europa Press, durante la detención, los agentes comprobaron que conducía un joven de 23 años, al que acompañaba una mujer y dos menores.

Pereira aclara que, además de iniciarse las diligencias correspondientes a un delito "contra la seguridad del tráfico por conducción con exceso de velocidad", también se ha abierto otra por "conducción temeraria" del que se ha dado cuenta al Ministerio Fiscal y a la Fiscalía de Menores porque en el vehículo viajaban dos menores que "estaban siendo puestos en peligro".

La delegada recuerda que tanto la conducción temeraria como el exceso de velocidad está tipificados como delitos en el código penal y pueden conllevar penas de hasta dos años de cárcel, y que pueden tener "otras consecuencias desde el punto de vista del Código Civil por la conducción temeraria con dos menores dentro del vehículo".

Por último, no había evidencias de consumo de alcohol en el conductor y que la "puesta en peligro de la vida" de los dos menores "puede entrañar la pérdida de la patria potestad", pero indica que se trata de una "decisión que tiene que tomar siempre un juez tras el correspondiente expediente por la Fiscalía de Menores".