El sector del jamón curado necesita mejorar los sistemas que garanticen la trazabilidad del producto. Esa es la principal conclusión del II Congreso Mundial del Jamón que ayer se clausuró en Cáceres y en el que se ha incidido fundamentalmente en tres aspectos: calidad, conservación y seguridad.

Aunque la producción del jamón ha realizado importantes avances en los últimos dos años en tecnología y certificación, los expertos consideran necesario trabajar en fórmulas que garanticen la calidad al consumidor y que comprendan todo el procesado del jamón hasta su llegada al mercado. En este sentido, los productores han incidido en la necesidad de realizar mejoras en la normativa que regula la calidad del producto en beneficio tanto del sector como el consumidor, a fin de evitar posibles fraudes.

ADAPTARSE A LA DEMANDA

El presidente del Comité Científico del congreso, Jesús Ventanas, también destacó ayer en las conclusiones la importancia de adaptar el producto a la demanda, principalmente a la del mercado extranjero, algo que obligará a los productores a desarrollar nuevas estrategias, tanto en el envasado como en la presentación.

Asimismo, en la jornada de ayer, dedicada a la gastronomía, se puso de manifiesto que el jamón curado aporta minerales y vitaminas son fundamentales y que la grasa, en especial la del ibérico, es rica en ácidos grasos muy beneficiosos para la salud.

En el acto de clausura participaron el vicepresidente de la Junta de Extremadura, Carlos Sánchez Polo, y el rector de la Universidad de Extremadura, Ginés Salido, quienes destacaron la importancia del sector en la región.

La organización anunció que el próximo Congreso Mundial del Jamón se celebrará en Teruel dentro de dos años.