El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez, ha asegurado hoy que en esta legislatura se materializará la equiparación de los trabajadores del campo por cuenta ajena al Régimen General de la Seguridad Social, algo que el Gobierno debería haber llevado a cabo en enero de 2009, tal y como había acordado con los sindicatos.

Vázquez ha expresado este convencimiento momentos antes del inicio del Congreso Regional de la Federación Agroalimentaria de UGT-Extremadura, en el que Juan Ogayar dejará su cargo tras casi 30 años al frente de la federación

Por ello, el III Congreso Regional de FIA-UGT, en el que participan más de 80 delegados, se ha convertido en un homenaje del mundo agrario y sindical a Ogayar, al que han asistido, entre otros, el secretario general de UPA, Lorenzo Ramos, o su antecesor en el cargo y ex secretario de Estado de Agricultura y Alimentación, Fernando Moraleda.

También se han dado cita en el congreso el secretario general de UGT-Extremadura, Francisco Capilla; el responsable de FTA-UGT País Valenciano, Jorge Tomás; o el también histórico dirigente sindical de la Federación Agroalimentaria extremeña de CCOO, Santiago Candelo.

En declaraciones a los periodistas, el consejero de Agricultura ha destacado que el día de hoy se convierte, así, en un homenaje y un reconocimiento a Ogayar por su labor en defensa de los trabajadores del campo en sus 30 años al frente de FIA-UGT, que coinciden con el periodo democrático.

A preguntas de Efe, Vázquez ha reconocido los enormes avances experimentados en este sector durante las últimas tres décadas y ha lamentado, al igual que Ogayar, que en este tiempo no se ha haya logrado la histórica reivindicación de equiparar a los trabajadores del campo a la rama general de la Seguridad Social.

En ese sentido, ha recordado que está pendiente de resolverse un acuerdo del Gobierno central en esta materia, "gracias al trabajo hecho durante muchos años por Juan Ogayar y gente como él", por lo que "pronto -ha dicho- se hará realidad algo que era un sueño y que ya prácticamente es algo conseguido".

Tras expresar su convencimiento de que esta equiparación se logrará en la legislatura, el consejero ha mostrado también el apoyo del Gobierno extremeño al sector para "aunar esfuerzos y pasar estos duros momentos que estamos viviendo lo mejor y lo antes posible".

Por su parte, Francisco Capilla ha destacado la importancia de la Federación Agroalimentaria de UGT-Extremadura y ha lamentado el incumplimiento por parte del Gobierno central de que los trabajadores del Régimen Especial Agrario pasasen a principios de 2009 al Régimen General.

Capilla ha anunciado que el III Congreso Regional de FIA-UGT servirá para redactar un documento que se presentará a la Junta con la intención de que este acuerdo se materialice en el plazo de tiempo más breve posible.

El dirigente sindical ha explicado que se abordarán otras cuestiones esenciales relacionadas con el futuro del sector agroalimentario extremeño, con un gran peso en el PIB de la región.

Juan Ogayar, por su parte, ha valorado su etapa al frente de la Federación Agroalimentaria de UGT-Extremadura y ha recordado que cuando él se puso al frente, esta organización contaba con menos de 150 afiliados, mientras que ahora la deja con unos 7.000.

Ogayar ha resaltado los logros obtenidos por el sector durante estos treinta años, no sólo en afiliación, como la consecución del convenio regional del campo que ha permitido la equiparación salarial y en derechos de los trabajadores agrarios extremeños.

De igual forma, se ha referido a otros convenios regionales como el del vino o el de conservas vegetales, o a la incorporación de la mujer al sector agroalimentario de la región.

Ha manifestado que "la única pena" que se lleva es no haber logrado la equiparación de los trabajadores agrarios con los del Régimen General, a su juicio "el único residuo que queda del franquismo", y ha señalado que no se quedará "tranquilo" hasta que esto sea una realidad, aunque ya no esté al frente de FIA-UGT.

Juan Ogayar, que será sustituido en su cargo por Raquel López, ya que es la única candidata que se presenta, ha definido como "brutal" el cambio que ha vivido el campo extremeño en estas tres décadas y ha recordado que antes "los empresarios iban a las plazas de los pueblos como si fuera una feria a buscar a los trabajadores, que trabajaban díez o doce horas por muy poquito dinero".