El consejero de Agricultura y Desarrollo Rural, Juan María Vázquez, aseguró hoy que la enfermedad de la 'seca' de la encina "no es un problema extremeño", sino que "quizá" en la región "es donde menos incidencia está teniendo de todas las zonas adehesadas arboladas de España y de Portugal".

El consejero explica que la región cuenta en la actualidad con unos 500 focos de seca, lo que representa menos del 1 por ciento de la superficie arbolada de la dehesa. No obstante, afirma que "desafortunadamente, hoy en día no existe ningún tratamiento para el control de la seca", dado que la mayoría de los productos que permiten amortiguar los efectos "no han resultado del todo efectivos".

Juan María Vázquez se pronuncia así durante su comparecencia, a petición del Grupo Popular, en la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural de la Asamblea de Extremadura, en la que señala que "todas las actuaciones" que se lleven a cabo son "fundamentales dentro de una estrategia de defensa de la dehesa", que "tiene que ser capaz de dar respuesta al reto de mantener el equilibrio entre la rentabilidad y la conservación", así como permitir "atender desde la investigación los retos sanitarios que plantea".

Por ello, destaca que las ganaderías juegan un "papel primordial" en el mantenimiento de las dehesas y pastizales de Extremadura, por lo que son "necesarias" políticas que incentiven la orientación productiva de la dehesa "hacia productos de calidad diferenciada" y "que den a conocer las excelencias de las producciones ligadas a la dehesa" para que sean valoradas en los mercados.

Al respecto, indica que es el momento de proyectar "la necesidad de que Europa contemple la protección de la dehesa con políticas de apoyo dentro del horizonte 2020" y subraya que la preservación de este ecosistema debe hacerse buscando la rentabilidad de las explotaciones, puesto que "lo peor que le puede pasar a cualquier explotación y a la dehesa es que por falta de rentabilidad económica se abandone".