La construcción protagoniza el crecimiento extremeño, con subidas anuales de más del doble del incremento medio total del PIB regional. En el 2004, el crecimiento de este sector fue del 17% frente al 7,3% de media.

Por contra, la industria se desmorona. Frente a un crecimiento del 7,3% en el 2001, el pasado año cayó un 1,3%, confirmando la tendencia a la baja del 2002 y 2003.

En términos absolutos, el PIB extremeño ha pasado de 10.500 millones de euros en el 2001 a casi 13.900 millones en el 2004. El sector que más aporta es servicios, con 8.000 millones en el 2004.

Otro dato llamativo es la aportación de los servicios no destinados a la venta (Administración) que suponen la quinta parte del PIB, con casi 3.000 millones de euros el pasado año.