Fue el regalo de Navidad de muchos hipotecados y llegó en forma de aclaración y enmienda a la justicia española: el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sentenció el pasado 21 de diciembre que la jurisprudencia sentada hasta ahora en cuanto a las cláusulas suelo por el derecho español (a través del Tribunal Supremo) es contraria al derecho de la UE. Determinaba así que aquellos consumidores que obtengan la nulidad de la cláusula suelo en una sentencia tienen derecho a recuperar todo el dinero pagado por ese concepto y no una parte como sucedía hasta ahora.

La sentencia ha inundado las asociaciones de consumidores y los despachos de abogados de afectados que quieren saber si pueden recuperar algo de lo que le han pagado en los últimos años en concepto de cláusula suelo, si con la nueva sentencia europea pueden librarse de ese apartado de su contrato de hipoteca o incluso si, aun teniendo sentencia, se pueden beneficiar del matiz que introduce el tribunal europeo.

Y ante la previsión de que los juzgados se colapsen con las demandas, el Gobierno acaba de aprobar un real decreto ley que contempla la posibilidad de un acuerdo extrajudicial entre el banco y el consumidor. Las asociaciones de consumidores ya han advertido de las lagunas de esta medida que, aunque no cierra la vía judicial, sí otorga a la banca la potestad de decidir si la cláusula es o no opaca y si debe devolver el dinero.

«Las consultas se han triplicado en lo que llevamos de mes», afirman desde la Unión de Consumidores de Extremadura (UCEX), donde se han atendido en las tres primeras semanas del año más de un centenar de casos, muchos de ellos de personas que incluso a estas alturas desconocían que tenían en su contrato de hipoteca una cláusula suelo. El trabajo en UCEX (que ofrece asesoramiento jurídico gratuito) es frenético desde hace tres semanas, ya que junto a los nuevos casos, han reactivado ahora más de medio centenar de expedientes que estaban paralizados, a la espera de conocer si el contenido de la sentencia europea podía resultar beneficioso.

También se nota el impacto de la decisión del tribunal europeo en la Asociación de Usuarios de Bancos Cajas y Seguros (Adicae). Esta semana han llevado a cabo asambleas informativas multitudinarias, tras meses en los que apenas una decena de personas acudían a este tipo de actos, y las consultas de afectados no cesan de llegar. «Hemos recibido diez veces más consultas que hace un mes», reconocen desde Adicae en Extremadura, donde también la actividad es incesante estos días.

trámite judicial/ En el despacho de Pita & Broncano de Cáceres han pasado desde que se conociera la sentencia unas 200 personas interesadas en conocer el procedimiento a seguir, junto a los clientes que ya tienen, y que se interesan a raíz de la nueva sentencia por saber cómo va su procedimiento y cómo le puede afectar lo dictaminado ahora por el tribunal de Luxemburgo.

«Llegan una media de siete u ocho personas cada mañana y otras tantas por la tarde interesadas en contratarnos», afirma Carmen Pita, una de las titulares del bufete. La mayoría de los que se acercan «son personas que incluso desconocían aún que tenían cláusula suelo y que lo único que saben es que su hipoteca no baja», aunque también hay personas que han querido esperar a que estuviera la sentencia para saber si podrían recuperar todo el dinero o no.

Este despacho ha gestionado más de medio millar de casos relativos a las cláusulas suelo solo en Cáceres. La gente llega allí «a ver si tenemos suerte», lo que para esta bufete de abogados resulta sorprendente porque, si bien los abogados no pueden nunca garantizar al cliente que el pleito está ganado, lo cierto este tipo de pleitos lo están. Pero la percepción de los despachos es que la gente es aún reticente a acudir a la justicia, e incluso muchas personas optan por acuerdos extrajudiciales con las entidades bancarias «aun cuando les suponen una pérdida económica».

La última sentencia del TJUE no ordena a los bancos a devolver el dinero de la cláusula suelo, sino que matiza cómo debe llevarse a cabo la devolución.

«En realidad la viabilidad de ganar este tipo de casos no cambia con la sentencia, pero sí ha animado a la gente a consultar cómo recurrir», dice Rafael Bueno Faundez, del despacho B&B Abogados y Procuradores de Badajoz. Solo en lo que va de mes han atendido unas 200 llamadas tanto de clientes como de otros afectados que quieren recurrir y han duplicado el número de expedientes abiertos. Si hasta ahora presentaban unas 40 demandas al mes, en los primeros 10 días del año han presentado ya 30 y la previsión era llegar a presentar 60 a finales de esta semana, antes de que se conociera el decreto del Gobierno central que abre la vía extrajudicial. Abogados y colectivos coinciden en que los términos del decreto persiguen evitar el atasco judicial aunque dudan de que lo vayan a conseguir. «Una negociación con el banco siempre le beneficiará y puede desproteger al consumidor», dicen en Adicae.

lo novedoso/ La sentencia europea no prejuzga si la cláusula es o no abusiva sino que si algo es abusivo, la devolución se debe hacer íntegra. Lo que dice es que cuando la cláusula suelo se considera abusiva (lo que requiere acudir a los tribunales para que un juez así lo estime), la sentencia tiene que contemplar la devolución «desde el momento en el que se firmó la escritura», recuerdan los expertos. Esa es la diferencia respecto a lo que se venía haciendo hasta ahora en España.

El código civil español establece en el artículo 1303 que si algo es nulo lo es desde el principio y por tanto si la cláusula suelo es nula, el consumidor debe recuperar todo lo pagado por ese concepto. Sin embargo una sentencia del Tribunal Supremo, de 2013, estableció que la devolución de todo el dinero conforme a lo que establece el código civil suponía un quebranto económico importante y por eso se limitó la retroactividad: permitía a los bancos no devolver nada, pero debía dejarse de aplicar la cláusula suelo.

Sin embargo, otra sentencia del Supremo en 2015 modificó ese criterio. Entonces el alto tribunal consideró que, puesto que ya en 2013 había indicado a los bancos a través de una sentencia que la imposición de una cláusula suelo era abusiva y debía dejar de aplicarse, y aún así la gente seguía acudiendo a los tribunales por ese motivo, todos los que a partir de ese momento tuvieran sentencia favorable en una demanda de cláusula suelo tenían derecho a recuperar el dinero desde la fecha en la que la primera sentencia (mayo del 2013) ya había advertido de que esa cláusula era abusiva.

Ahora lo que hace la justicia europea es ir un paso más allá e imponer que la devolución debe ser total y no parcial.