Las rencillas entre el equipo médico y el equipo de gobierno de Plasenzuela ni empiezan ni terminan en los juzgados. "Prestan un servicio de poca calidad", observan entre las paredes del ayuntamiento. "Son cosas de unos pocos, porque aquí todo se mueve por intereses políticos y particulares", responden los empleados del consultorio.

Desde el consistorio plasenzuelano han llegado incluso a ponerse en contacto con el coordinador de zona del Servicio Extremeño de Salud (SES) para quejarse de los facultativos: "Atienden cuando quieren, se marchan de paseo o a tomar café sin avisar, dejan pacientes esperando hasta que ellos vuelven...". Todo son quejas.

Los últimos problemas han surgido por el cambio de horarios de consulta. Desde el 1 de mayo, la atención programada se presta de 9 a 10 de la mañana y las consultas ordinarias se atienden de 10 a 12, una hora más tarde de lo que era habitual hasta ahora. Esto ha provocado desorientación y malestar en algunos vecinos, aunque los facultativos aseguran que este cambio se había anunciado mediante carteles en el consultorio desde principios de abril. "Tenemos derecho a organizar la jornada como creemos más adecuado", defiende el ATS, José Luis Hermoso, que recuerda que, además de Plasenzuela, tienen que atender la vecina Botija. A pie de calle, prácticamente nadie pone objeciones a la atención que reciben de los dos sanitarios. "Nunca he tenido problemas", es el comentario más repetido entre los vecinos.