El virus se contagia fundamentalmente a través de la sangre, pocas veces por relaciones sexuales y excepcionalmente de madre a hijo. En bastantes ocasiones se desconoce el modo de contagio. Algunos pacientes son diagnosticados y no tienen ningún antecedente que justifique el contagio, por lo que se supone que existen vías de infección diferentes de las nombradas, y que no han podido ser demostradas hasta el momento. Se debe tener especial cuidado ante transfusiones sanguíneas, los tatuajes y piercings, relaciones sexuales de riesgo, compartir jeringuillas (relacionado con la droga),... Compartir cepillos de dientes o maquinillas de afeitar puede poner en contacto la sangre de un paciente infectado con la de uno no infectado. En todo caso no se contagia por la leche materna, abrazos, tos, estornudos, comida o agua, contacto, compartir vasos...