Los vecinos de Esparragalejo, La Garrovilla y Torremayor se han visto afectados por el corte de la carretera EX-209 a consecuencia de las obras de mejoras que la Consejería de Fomento está realizando. Este corte es provisional mientras duren los trabajos en un puente, que han obligado al cierre total de la vía que les une a Mérida.
Muchos de sus vecinos --entre las tres localidades suman 5.000 habitantes-- se desplazan a diario a la capital extremeña, pero desde el pasado lunes, fecha en la que se cerró al tráfico porque se ha derribado el puente sobre el río Aljucén, se ven obligados a desplazarse por la carretera de la presa de Montijo, una vía privada perteneciente a la Confederación Hidrográfica del Guadiana, o triplicar el recorrido habitual llegando hasta la autovía A-5, cerca de Arroyo de San Serván.
Algunos de los afectados han explicado que la opción "más corta y la que está utilizando la mayoría" es llegar a la capital autonómica a través de esta carretera privada, por lo que los seguros no cubren los desperfectos en caso de un siniestro.
El alcalde de Torremayor, Miguel Estribio, ha señalado que teme por la posibilidad de que se produzcan accidentes en el trayecto que deben realizar por la carretera comarcal hasta Arroyo, por lo que ha pedido "celeridad" a la Junta. El primer edil de Esparragalejo, José Francisco Ramírez, ha explicado que se ha reunido con los vecinos y que han propuesto a la Junta varias opciones alternativas pero que no les han escuchado.
Además, Ramírez ha solicitado al ejecutivo regional que disponga una ambulancia en su localidad para atender urgencias sanitarias, ya que con la ruta actual un herido tardaría más de una hora en poder ser atendido en el hospital si parte desde Mérida.
Ante las quejas de los regidores municipales de la zona de "falta de previsión", el director general de Infraestructuras de la Junta, José Ignacio Sánchez, asegura que la Junta ha estudiado "profundamente las alternativas" y que ha elegido "la más segura".
