El exdirigente de la organización agraria COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) Luis Cortés quedó ayer en libertad con cargos tras prestar declaración ante el juzgado de instrucción número 4 de Mérida por un presunto fraude en el cobro de fondos europeos para la organización de cursos de formación entre los años 2002 y 2005, un delito por el que fue detenido el pasado martes, 3 de julio, junto a otras seis personas más. Los cargos que pesan sobre él son los de fraude en la utilización de los curso y falsedad documental.

Según explicó su abogado, Manuel Villalón, el exdirigente agrario prestó declaración el jueves durante 12 horas ante los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil que llevan el caso, para después, en torno a las 21.30 horas, pasar a disposición judicial.

Sin embargo, el traslado desde las dependencias de la Guardia Civil en Badajoz, en cuyos calabozos ha permanecido detenido desde el martes, hasta las dependencias del juzgado de instrucción número 4 de Mérida no se produjo hasta la jornada de ayer. El acusado llegó a las diez de la mañana a la sede judicial, aunque hasta las 11.00 no comenzó su comparecencia ante el juez. Tras casi cinco horas de declaración, Cortés fue puesto en libertad con cargos, aunque sin fianza, según precisó su letrado.

La operación fue llevada a cabo el pasado martes por los agentes de la UCO e involucraba a los siete detenidos --todos exempleados de COAG-- en la supuesta organización de cursos para desempleados que no llegaron a realizarse y que tenía como fin cobrar las ayudas del Fondo Social Europeo a través de la Fundación para la Formación Continua y la Fundación Tripartita (Ministerio de Trabajo, servicios públicos de empleo, sindicatos y organizaciones agrarias). En total, se cifra en más de 5 millones de euros la cantidad que Luis Cortés podría haber defraudado entre los años del 2002 y el 2005, cuando fue expulsado de la organización agraria.