La situación de crisis e insostenibilidad se agrava en el campo extremeño. Según denunció ayer la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-UCE), los costes de producción se han disparado en los últimos tres meses para los ganaderos de la región ante la subida "desmesurada" del precio de los piensos. En concreto, de acuerdo con los cálculos de esta organización, los productos cerealísticos para la alimentación de animales se han encarecido entre un 25 y un 30% desde octubre.

El secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas, volvió a reclamar ayer medidas a las administraciones para poner fin a una situación que tachó de "crítica". Huertas apuntó a intereses especuladores que están provocando que, mientras los precios de los productos ganaderos siguen en niveles muy bajos, los del pienso se estén disparado sin que esto redunde en los agricultores cerealistas. Así explicó que estas subidas se han producido cuando los agricultores ya habían vendido sus cosechas, lo que le hace pensar que "unos cuantos especuladores están haciendo el agosto".

Desde UPA-UCE estiman que, por ejemplo, cebar un cerdo se ha encarecido entre 25 y 30 euros por animal durante estos últimos meses por el alza del coste del pienso, mientras que en el caso de los criadores de terneros el aumento ha rondado los 60 euros. "Y esta subida de costes los ganaderos no la han podido repercutir en el precio de sus producciones", apunta Huertas, que recuerda la posición de debilidad que ocupan los ganaderos dentro de la cadena de precios y el incremento cada vez mayor de los márgenes comerciales pese a que los ingresos de los profesionales del campo se mantienen casi invariables y los consumidores cada día pagan más en los puntos de venta.

Por este motivo solicita a la Junta y al Gobierno su implicación para adoptar medidas que sirvan para establecer mecanismos de control y equilibrio del mercado y aliviar la crisis que vive el sector.