Los ganaderos extremeños han gastado durante los nueve primeros meses del año un 20% más en alimentación complementaria respecto a un ejercicio normal, debido a la ausencia de lluvias en la primavera y verano pasados. El presidente de la asociación Ganaderos del Reino, Enrique de Muslera, explica que muchos ganaderos se han visto obligados a adelantar el periodo de esta alimentación complementaria debido a la ausencia de hierba. En algunos casos, la escasez de lluvias durante primavera ha obligado a las explotaciones a depender desde hace dos meses de pienso, heno o paja.

Según indica De Muslera, el campo está "seco" en muchas zonas debido a la ausencia de precipitaciones durante el segundo y tercer trimestre del año, lo que dejó a los ganaderos extremeños en una situación "preocupante". Afirma que es necesario que en los próximos días llueva "muchísimo", pues las precipitaciones se precisan de forma "urgente". No obstante, aunque el agua sea ahora abundante, los ganaderos se verán obligados a utilizar pienso durante todo el otoño, debido a que el campo no presenta estampas de hierba considerable hasta unos dos meses después de que se produzcan los episodios de lluvia. En cualquier caso, el responsable de Ganaderos del Reino recuerda que "unos años son mejores, pues llueve mucho, y otros peores, con meses prolongados de sequía, y son situaciones que se deben afrontar".

Los ganaderos cuentan además con el seguro de sequía en pastos, como ha indicado. La mayor "preocupación" de la ganadería extremeña es ahora la lluvia, aunque el vacuno tiene la problemática de la tuberculosis y en corderos y terneros ha habido una reciente bajada de precios.