El número de empleos sumergidos que ha aflorado en 2014 ha aumentado con respecto a 2013 en un 10,4 por ciento, de 2.056 a 2.270, gracias a las más de 35.000 actuaciones de la Inspección de Trabajo ha llevado a cabo este año.

Así lo ha destacado hoy la directora general de Trabajo, Irene Marín, antes de la reunión en Mérida de la Comisión Territorial de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

Marín ha avanzado algunas de las cifras correspondientes al informe de 2014 y ha anunciado que está previsto que el número de actuaciones de la Inspección se incrementen en 1.500 en 2015.

Respecto a los datos generales del año que aún no ha finalizado, ha valorado el aumento de actuaciones en un 7 por ciento respecto a 2013, a pesar de una reducción puntual del número de inspectores en la provincia de Cáceres que, según ha aclarado, "se subsanará".

En este aspecto, ha precisado que la región cuenta con 21 inspectores y 23 subinspectores.

El número de visitas en horarios especiales, es decir, días festivos y horarios nocturnos, ha aumentado un seis por ciento, de 651 a 693, y también se han intensificado en un 20 por ciento el número de actuaciones para controlar la igualdad efectiva entre mujeres y hombres en el ámbito laboral.

Marín ha destacado que en 2014 creció un 10,4 por ciento el número de empleos sumergidos que afloró, de 2056 a 2.270, lo que, a su juicio, es un dato positivo, puesto que, según ha dicho, "este tipo de empleo no solo afecta a la recaudación de la Seguridad Social sino a los derechos laborales de los trabajadores".

Del total del expedientes abiertos, 17.082 han derivado 5.943 infracciones, lo que supone un incremento respecto a 2013 de un 41 por ciento.

En cuanto al tipo de infracciones, 48 han sido de trabajo, incluidas las acciones u omisiones de los empresarios contrarias a las normas legales; 302 de riesgos laborales; y 3.231 de empleo, -cometidas, entre otras, por aquellos que están en paro mientras trabajan-, que han aumentado un 39 por ciento respecto a 2013.

Frente a esta subida, las infracciones en materia de trabajadores extranjeros han descendido un 50 por ciento, al igual que las obstrucciones a la labor inspectora (-46 por ciento).

Por otra parte, Marín ha asegurado que la Inspección ha hecho un importante esfuerzo por evitar el fraude en la contratación, ya que ha aumentado un 23 por ciento el número de contratos temporales que se han convertido en indefinidos.

En este aspecto, ha explicado que existen campañas impulsadas por el Gobierno, como la del control de maquinaria en industria y agricultura, ya que esta última ha experimentado un repunte en siniestralidad.

A nivel europeo, ha indicado Marín, se desarrollará próximamente una campaña para analizar el estrés en el trabajo, a la que se sumará otra en riesgos psicosociales y violencia en el trabajo.

Finalmente, ha precisado que se controlarán las contrataciones temporales fraudulentas, las cesiones ilegales de trabajadores y la integración de las personas con discapacidad.

De hecho, ha recordado que ayer se aprobó en Consejo de Gobierno un convenio de lucha contra el fraude en colaboración con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.