Menos trabajadores afectados por Expedientes de Regulación de Empleo (EREs), menos empresas en quiebra y menor reducción de la producción industrial. Estos tres datos, dados a conocer ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de Trabajo, muestran que Extremadura no se está librando de la crisis económica, pero, al menos de momento, la padece en menor medida que otras comunidades autónomas y el conjunto de España.

De este modo, por ejemplo, Extremadura fue la región en la que menos personas perdieron su empleo o vieron modificada su situación laboral de forma temporal por los EREs autorizados a sus empresas, en concreto 613 frente a las más de 30.000 que vivieron esta situación en Cataluña, la primera comunidad de este desafortunado ránking. En toda España, se autorizaron 6.277 expedientes de regulación de empleo durante el año pasado, un 64,13% más que en el 2007, pero mayor incluso fue el incremento de la cifra de trabajadores afectados: un 152,52%, hasta llegar a los 147.476.

También aumentó considerablemente el año pasado el número de empresas y familias que se declararon en quiebra, que ascendieron a 2.092 en todo el país. En este caso, Extremadura --donde se registraron 28 concursos de acreedores en el 2008-- ocupa el tercer puesto de la clasificación de comunidades con menos empresas o familias en suspensión de pagos, liderada por La Rioja (25) y Cantabria (27). A nivel nacional, el año pasado se declararon en quiebra 374 familias (un 289,6% más que en el 2007) y 2.528 empresas (un 187,3% más). Cabe destacar que solo Cataluña, la Comunidad Valenciana y Andalucía acapararon el 60% de los concursos, es decir, que registraron, respectivamente, 681, 390 y 373 casos.

Finalmente, tampoco el Indice de Producción Industrial (IPI) se libró el pasado mes de diciembre de los descensos acarreados por la mala situación económica. Lo único positivo es que, comparada con la reducción del conjunto del país (15,4%), el descenso de la producción industrial de Extremadura en diciembre del 2008 de un 2,2% con respecto al mes anterior es claramente inferior. La extremeña vuelve a convertirse de este modo entre las comunidades menos perjudicadas por la crisis, solo superada por La Rioja, que registró un crecimiento del IPI del 2,5%.

Todas las demás regiones españolas registraron caídas que, en el caso de Andalucía y Valencia (las peor paradas), superaron los 20 puntos porcentuales (20,8% y 20,2%, respectivamente). Sin embargo, aunque aún es pronto para sacar conclusiones, el balance de lo que llevamos del 2009 no resulta tan positivo para la comunidad extremeña, cuyo descenso de la producción industrial, si bien se mantiene por debajo, se acerca a la media nacional: un 4,2% en Extremadura frente al 6,2% de España.