La noche del sábado acabó mucho antes de lo que hubieran querido los simpatizantes e incondicionales del Carnaval de Cáceres, con la carpa cerrada a las 3.00, la zona de Pizarro y la plaza bajando persianas en torno a la misma hora, y La Madrila agotando los cartuchos a las 4.30.

Respecto a la carpa, la policía municipal llegó hacia las 2.20 y recordó la obligación de este tipo de instalaciones de cesar su actividad a las 3.00. En cuanto a los bares, los hosteleros fueron informados de que el permiso otorgado por la Junta de Extremadura para prolongar dos horas el cierre en los establecimientos de la región, del 5 al 10 de febrero con motivo del Carnaval, incluye este año una clausura que deja esta resolución sin efecto en las 'zonas saturadas' (exceso de bares), precisamente donde se concentran los locales de copas: Madrila, plaza Mayor y Pizarro. El PERIODICO constató ayer que en Mérida y Badajoz estos espacios siguieron abiertos.

La indignación era ayer manifiesta en el ámbito carnavalesco. El perfil de Facebook de 'Cáceres Carnaval' tenía decenas de comentarios y cientos de adhesiones al mensaje redactado por la Asociación Cultural Cáceres Carnaval tras el cierre de la carpa: "De auténtica vergüenza... Nos preguntamos cómo es posible que pase esto en nuestra ciudad cuando en toda Extremadura siguen disfrutando de la noche y lo harán seguro hasta el amanecer (...) Empezamos a preguntarmos si hay alguien interesado en que el Carnaval de Cáceres no siga en aumento (...) Estad atentos porque emprenderemos acciones".

Y es que el programa ha sido íntegramente ideado y coordinado por dicha asociación, que ha delegado los eventos de la carpa en Daniel Luceño, muy vinculado al colectivo. Este organizador ha corrido con los gastos del sonido, la barra, una decena de empleados, la banda de West, los DJ y otros contenidos (salvo la instalación de la carpa, que ha financiado el ayuntamiento). "No nos ha dado tiempo a cubrir los gastos, ha sido increíble, a las 2.20 de la madrugada me avisaron los colaboradores de seguridad de que la policía quería hablar conmigo. Entonces unos agentes de paisano me enseñaron a través de un móvil la normativa de la Junta de Extremadura para concentraciones masivas en espacios públicos, y me dijeron que tenía que cerrar a las 3.00. No me lo podía creer. El año pasado acabamos a las 6.00 y el anterior a las 5.00", explica Daniel Luceño. "Difícilmente nos podemos volver a encargar de unos gastos semejantes. Con lo que hemos luchado por levantar el Carnaval...", lamenta.

En ese momento la carpa tenía una buena afluencia. El mensaje de cierre fue transmitido a las comparsas mediante el grupo de whatsapp formado por los representantes de todas ellas, y el público no daba crédito. "Había muchísima gente, el ambiente era estupendo, sin ningún problema de seguridad. Todavía estaba tocando la Banda de West y el DJ Jesús Vaca adelantó su actuación cuando la noticia empezó a correr por la carpa", explica Belén, una amante del Carnaval que estaba disfrutando de la noche.

La presidenta de la Asociación Cultural Cáceres Carnaval, María Luisa Iglesias Gilete, se mostraba ayer visiblemente abatida después de semanas de intenso trabajo. "No entendemos nada, alegaron que hay una normativa de la Junta, pero se supone que esa orden será para toda Extremadura. Sabemos que Casar de Cáceres cerró su carpa a las 9.00 y Aliseda a las 6.30, y no vamos a hablar de Badajoz y Mérida... No queremos que fastidien a nadie, sino que nos dejen disfrutar a todos", indicó.

PERDIDAS La responsable también teme los efectos de esta medida: "Nos han tirado por tierra el trabajo de tres años para levantar el Carnaval de Cáceres, la gente se ha hecho su disfraz y venía ilusionada, luego nos da pena que se vayan a Badajoz...". Iglesias espera que se dé una respuesta a los cacereños y asegura que la carpa ha registrado "perdidas considerables".

Sea como fuere, a las 3.00 cesó la música y el público inició el desalojo con algunos silbidos y pitadas, pero de forma tranquila. Los agentes también disuadieron a algunos botelloneros que estaban en los soportales. Había que buscar otros lugares para seguir el Carnaval. Los que optaron por la plaza y Pizarro pronto descubrieron que los bares estaban cerrando a la misma hora. Los que acudieron a La Madrila tuvieron de plazo solo hasta las 4.30 antes de verse otra vez en la calle. Unicamente permanecieron abiertas algunas salas y discotecas situadas a cierta distancia

de las grandes zonas de copas, en algunos casos a solo unos metros, una diferencia que los hosteleros calificaron ayer de "claramente discriminatoria".

"Jamás habíamos visto esta cláusula de 'zonas saturadas', se la han sacado de la manga", criticaron ayer los empresarios de Pizarro, que esperaban cerrar a las 5.00 y tuvieron que hacerlo pasadas las 3.00. "En los últimos veinte años no había ocurrido nada así, esa resolución es injusta y además la policía nos avisó de que podíamos recibir una denuncia por desobediencia", explicaron los empresarios de La Madrila, que había previsto su actividad hasta las 6.30 y tuvieron que cerrar a las 4.30, como cualquier otro sábado.

BAILE DE MASCARAS Precisamente, a esa hora La Madrila estaba llena y en la sala Barroco unas 300 personas celebraban el Baile de Máscaras, recuperado por el Gran Teatro en 2013 y trasladado a este local de Albatros. "La gente lo estaba pasando fenomenal", afirma el propietario, David Vivas, que de momento, y con el disgusto del cierre, no tiene ganas de pensar en volver a organizar algo similar. "El viernes también habíamos previsto una programación especial y ocurrió lo mismo", relata.

"Seguro que en Badajoz esto no ocurre", era la frase que ayer corría de boca en boca por Cáceres. Y ciertamente en la capital pacense regía la misma resolución para el Casco Antiguo, calificado de 'zona saturada' y de donde al parecer ha partido la denuncia de un grupo de vecinos que se ha organizado como asociación contra los ruidos por las molestias que soportan todo el año. La notificación se mandó a los bares pero no hubo ningún problema porque, por la peculiaridad del Carnaval pacense, el principal ruido procede precisamente de la calle, de las comparsas y artefactos que van con sus instrumentos de percusión a todas horas, informa A.M. Romasanta.

En Mérida, la carpa municipal estuvo funcionando hasta las siete de la mañana con música y ambiente, según testimonios recogidos por Carmen Hidalgo.