El programa de ayuda a domicilio complementaria con el que Cruz Roja atiende a 1.400 mayores en toda Extremadura se refuerza y mejora con la incorporación de cinco nuevos vehículos financiados con fondos procedentes del IRPF. Hasta ahora, los 160 voluntarios de este servicio compartían los vehículos con el resto de programas que desarrolla la oenegé.

Los cinco coches, marca Hyundai i30, se repartirán en las sedes de Badajoz, Cáceres, Plasencia, Jaraíz, Castuera y Fuente de Cantos, desde donde prestarán servicio al resto de poblaciones de la comunidad. Además de estos vehículos, que la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, presentó ayer junto al presidente autonómico de Cruz Roja, Francisco Javier Caro, el programa de ayuda domiciliaria ha recibido 200.000 euros también con cargo al IRPF.

Caro explicó que con este proyecto de atención a los mayores pretenden evitar las situaciones de desarraigo, acompañando a estas personas en su entorno en diversos ámbitos (ocio, rehabilitación, traslados...), al mismo tiempo que se complementa la labor del cuidador habitual proporcionando a estos últimos programas de respiro, con el objetivo de mejorar la autonomía y la calidad de vida de las personas dependientes.

Pereira recordó que de la pasada campaña del IRPF a Extremadura han llegado 6,5 millones de euros para financiar proyectos sociales de oenegés y entidades sin ánimo de lucro. En total, Cruz Roja ha recibido 1.742.000 euros con los que desarrolla programas dirigidos a la infancia, mayores (el 65% del montante), toxicómanos, juventud, promoción de empleo y atención a las nuevas personas en riesgo de exclusión a causa de la crisis. Suponen 11.000 beneficiarios y han creado 25 empleos directos y 100 indirectos.

"Son muchos los proyectos que se ponen en marcha con la aportación del IRPF, por eso es muy importante que no olvidemos marcar la cruz en la casilla que consideremos más conveniente", recordó Pereira.