Varias cuadrillas extremeñas han sido las protagonistas de la temporada de saca de corcho en las dehesas salmantinas, ante la ausencia de personal cualificado para esta tarea en la provincia vecina. Además esta materia prima extraída se transformará en la región.

Es el caso de la cuadrilla que dirige la empresa de Antonio Arias, llegada desde el municipio pacense de Cordobilla de Lácara, que desde el pasado junio se asentaron en la finca Dehesa Rabida de Ciudad Rodrigo, donde hay una gran mancha de alcornoques. "La mano especializada no la podemos contratar en Salamanca, ya que no hay personal que sepa sacar el corcho de los árboles y, por tanto, la mano cualificada tiene que venir de Extremadura", explica el responsable.

La mayor producción de corcho del país se encuentra en Andalucía, Extremadura y Castilla-

La Mancha, mientras que en Castilla y León las únicas provincias con poblaciones relevantes de alcornoques son Salamanca y Zamora, aunque "no es muy significativa". En estas provincias no existen industrias transformadoras, por lo que la materia extraída se transporta por lo general a diferentes lugares de Extremadura. El extraído de la Dehesa Rabida se llevará hasta los cocederos de Cordobilla de Lácara y Hornachos (Badajoz), donde reposará varios meses hasta que esté bien curado. Tras el proceso su destino será Portugal y empresas mayoristas de las bodegas de La Rioja.

En cuanto a los precios, este año han descendido mucho con respecto a otros, principalmente porque en el 2009 no fue rentable la extracción y "este año la producción se ha duplicado, en relación a un año normal".