Las cuatro familias de Badajoz que llevan acampadas una semana frente la residencia oficial del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en Mérida, para reclamar una vivienda de promoción pública, iniciarán este lunes una huelga de hambre. La mantendrán "por tiempo indefinido" y únicamente tomarán agua con limón, según indicó ayer el presidente de la Asociación para la Recuperación de Suerte de Saavedra, Antonio Chacón. La huelga de hambre comenzará a las 8 de la mañana, y al inicio "se pesará a cada uno de ellos, para así poder intentar controlar su estado de salud".

Se trata de cuatro parejas de Badajoz. De ellas, tres familias "están a las puertas de ser desahuciados en breve por no poder pagar el alquiler, ya que carecen de medios económicos al estar en paro", y la cuarta familia vive "apilada" en un piso de 70 metros con otras 11 personas, en el que subsisten con tan solo 427 euros del paro de uno de ellos.