Cuatro de los heridos en el accidente de tren continúan ingresados en los hospitales de Cáceres y Badajoz, ninguno de ellos en estado grave, mientras que los otros seis han sido dados de alta.
Según la agencia Efe, la consejera de Sanidad y Dependencia de la Junta de Extremadura, María Jesús Mejuto, informa en Cáceres están ingresados una abuela y sus dos nietos, y en Mérida el conductor del tren.
La abuela, de 64 años, tienen una contusión torácica, está estable y su pronóstico es reservado.
Uno de sus nietos, de tres años, sufre un trauma abdominal y estaba siendo intervenido.
El TAC ha evidenciado que hay "líquido libre", según la consejera, que ha precisado que su situación era estable antes de entrar en el quirófano y que no se puede dar un diagnóstico hasta que concluya la intervención.
Su hermano, de siete años, tiene una contusión mandibular, con fractura doble, "dos pequeñas fisuritas", según Mejuto, y está estable con un tratamiento conservador.
Entre los diez heridos, cinco hombres y otras tantas mujeres, estaba también la madre de los pequeños, de 39 años, una de las personas que ha sido dada de alta.
Los seis heridos dados de alta ha sufrido contusiones y traumatismo leves.
