Lo que empezó como una fiesta de cumpleaños se convirtió en una batalla campal en un local de la localidad de San Vicente de Alcántara en Badajoz. Los invitados llegaron alrededor de las ocho y media de la tarde del pasado miércoles al Hotel Rural del Pueblo, propiedad de los padres de Consuelo Abela, que ese día cumplía 13 años. Todo estaba preparado para el convite tan esperado

Poco después apareció la hija de una de las empleadas del establecimiento, concretamente de la cocinera del restaurante, Raimunda Cantero, quién aseguró que su hija había sido invitada a la celebración. Sin embargo, la madre de Consuelo y dueña del hotel, Fátima Hernández, no estuvo de acuerdo y consideró que la pequeña debía abandonar la fiesta de inmediato, pidiéndole a la chica que, por favor, se marchara de allí.

Tras ello, la hija de la cocinera fue a contar lo sucedido a su madre, que acudió al local para pedir explicaciones. Al final las dos madres se enzarzaron en una pelea hasta propinarse una paliza.

Pero el incidente no quedó ahí. Cuando la cocinera y su hija regresaron a casa, el marido de Raimunda, José Vega, se dirigió hacia el local. También fue agredido. El propietario del hotel, Sisenando Abela, aseguró que José llevaba un ladrillo y lo rompió contra la puerta hiriéndose. Pero José insiste en que fue golpeado con un taburete.

El resultado de la disputa fueron cuatro partes de lesiones ante la Guardia Civil. La hija de la cocinera, Cristina Vega, de 14 años, presenta contusiones y mordiscos en el brazo derecho; su madre, lesiones en la región cardiodorsal y en la zona inferior de la mandíbula, y el tercer miembro de esta familia, José Vega, fue atendido con una herida incisa de 0,5 centímetros de profundidad en la ceja derecha.