Decenas de extremeños --el número exacto es difícil de determinar dado el secretismo a que se obliga en estas actuaciones-- han caído en un presunto timo piramidal, a través de una empresa que centra sus actividades en Utrera (Sevilla), pero que está captando inversores en el sur de la provincia de Badajoz.

El modo de operar, ya empleado en diversos puntos del país, y conocido también en Extremadura por anteriores actuaciones en Badajoz y Cáceres, consiste en que cada persona que se incorpora a la red aporta 2.700 euros, de los que 1.200 van a un supuesto curso de formación.

El resto se divide en dos partes: 900 euros que se queda la persona que introduce al nuevo socio , y otros 600 que van al bolsillo del que, a su vez, introdujo al primero. Eso sí, la persona que lleva a un nuevo primo , no cobra nada hasta que ha convencido, al menos, a tres, momento en el que recupera los 2.700 euros aportados en un principio.

Se establece así una estructura piramidal, donde el que ha logrado meter ya a tres empezaría a ganar dinero con lo que le aporten aquellos a los que convenzan los que él introdujo.

POCO CLARO Según declaró a EL PERIODICO una de las personas que asistió a las reuniones de Utrera --y que, finalmente, no firmó "porque no estaba nada claro"-- para entrar en esta cena-reunión hay que poner 30 euros. Luego, "te dan tres charlas, donde, con una pizarra, te explican que aquello es una pirámide, y que ganarás mucho dinero".

Entre charla y charla, "te hacen firmar un documento donde se dice que no puedes contar lo que pasa allí", y en la cena "siempre ponen en cada grupo a un gancho , al que no conoces de nada, pero que te habla del dineral que está ganando".

Según este testigo, "es en la última conferencia cuando te dicen cuánto hay que poner y te aclaran que el curso no se da realmente". Luego, provisto de una tarjeta, "donde figura Cash-World Wide Sin Limite , vuelves a casa, para llamarles el lunes (las cenas son en sábado) y pagar".

Aunque abogados consultados por EL PERIODICO dudaron de la posibilidad de imputar un delito de estafa por estos hechos "porque, en principio, habría que ver si quien capta nuevas personas no está también estafando", el presidente de la Unión de Consumidores de Extremadura, Javier Rubio, no dudó en calificar las actuaciones de "estafa a gran escala", aunque señaló que la UCE no tiene aún constancia de denuncias por los hechos.