La Asociación de Vecinos de La Madrila en Cáceres y la Asociación Extremeña para la Defensa de los Afectados por el Ruido (AEDAR), en representación de los vecinos de Mérida, confirmaron ayer que llevarán a sus ayuntamientos ante los tribunales por considerar que permiten que en sus ciudades se vulnere constantemente la normativa que regula el ruido y las actividades molestas, en aspectos como el incumplimiento de horarios por parte de los establecimientos de copas.

En el caso de Cáceres, la asociación presentará una demanda civil a finales del próximo mes, ya que pretende poner en marcha todos los trámites tras una asamblea extraordinaria que se celebrará el 16 de abril. En cuanto a Mérida, el colectivo extremeño ya ha puesto toda la documentación necesaria en manos de un abogado con el objetivo de iniciar este mismo mes un contencioso administrativo.

LA UNICA SALIDA

Así lo manifestaron ayer el presidente de la asociación vecinal cacereña, Miguel Salazar, y la presidenta de AEDAR, Maribel Fernández, quienes incidieron en que "no hay más remedio que llegar a esta situación", debido a que las Administraciones locales no han procurado que se cumpla la normativa regional sobre ruidos y actividades molestas, a fin de "garantizar el derecho al descanso del ciudadano".

Estas iniciativas se unen a la de la asociación pacense Puerta del Pilar, que fue la primera en presentar un contencioso administrativo contra el Ayuntamiento de Badajoz por las molestias causadas por el botellón , y que en la actualidad se encuentra en el Tribunal Supremo tras ser desestimado por el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.

JURISPRUDENCIA

En este sentido, Salazar indicó que ya existen cuatro sentencias del Supremo favorables a los vecinos, la última de este mismo mes, en la que se condena a las administraciones a indemnizar a los afectados.

"Ningún tribunal, a partir de ahora, podrá rechazar los argumentos que afirman que estamos ante un delito de contaminación acústica, y si los ayuntamientos no toman cartas en este asunto y ponen una solución al problema tendrán que rendir cuentas ante la justicia", advirtió el presidente de La Madrila.

Por su parte, la presidenta de la asociación contra el ruido incidió en que "ninguno de los casos que ha llegado al Tribunal Supremo se ha perdido, y ya es hora de que los tribunales se pongan de parte de los vecinos que desde hace mucho tiempo sufrimos por culpa de los ruidos".