Comisiones Obreras de Extremadura denuncia que Renfe sustituirá el Talgo, que circula diariamente entre las ciudades de Badajoz, Mérida, Cáceres y Madrid por las mañanas, y en sentido inverso por las tardes, por un tren regional a partir del próximo 19 de diciembre.

Por ello, según la agencia Efe, la Federación de Servicios a la Ciudadanía del sindicato insta a los poderes públicos a que eviten "este nuevo retroceso con que la dirección de la empresa pública Renfe quiere castigar a los usuarios del tren de Extremadura".

CCOO asegura que la decisión ya está tomada y sólo falta para que entre en vigor la preceptiva formación de los maquinistas que conducirán los trenes regionales, tipo 598, que sustituirán al Talgo actual, que es "el mejor tren que tenemos".

El sindicato considera que este cambio de material ferroviario alejará a los viajeros que solían utilizar este medio de transporte para sus desplazamientos hacia Madrid ya que, aunque se quiera mantener la misma relación con un tren regional, "las prestaciones y condiciones de comodidad de este último se alejan mucho de las ofrecidas por el Talgo".

Ello, unido a la duración del viaje y al precio, "hace que sea poco atractivo viajar a la capital en un tren regional", afirma el sindicato. A esta situación añade la "falta" de maquinistas en la residencia de Cáceres, que provoca la supresión del tren Arco con origen en Badajoz y destino Barcelona cada vez que se produce una baja por enfermedad o la solicitud de licencias, lo que obliga a realizar al viaje en autobús entre Badajoz y Alcázar de San Juan.

Estos dos casos, según indica, son una muestra del "precario" estado en que se encuentran los trenes de larga distancia en Extremadura.

Mientras tanto, agrega, "el AVE va despacio y de las inversiones prometidas por el Ministro de Fomento hace 16 meses para viajar a Madrid a través del intercambiador de Brazatortas, nunca más se supo".

Argumenta que, por un lado, la Junta de Extremadura contribuye al mantenimiento de los servicios de los trenes regionales e intenta mejorarlos y, por otro, Renfe se "desentiende" de los viajeros extremeños "en una actitud de desdén que pretende disuadir a la ciudadanía de usar el ferrocarril como medio de transporte".

Recuerda además que el Gobierno decidirá en breve qué trenes tienen la consideración de obligación de servicio público, lo que unido a un proceso de "privatización" de las mercancías y las terminales, y la "continua" externalización del canal de venta ha motivado la manifestación que el 27 de noviembre se celebrará en Madrid en defensa del ferrocarril público.