Las denuncias por infracciones contra el medio ambiente bajaron un 25% en el 2008 en la región según los datos aportados ayer en Cáceres por la delegada del Gobierno, Carmen Pereira que cifró en 4.900 --2.600 en la provincia de Cáceres y 2.300 en la de Badajoz-- las infracciones administrativas registradas en Extremadura en el último año por los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil. En el 2007 los agentes instruyeron 6.673 diligencias por este motivo en la región. La práctica de la pesca, la caza y la ordenación del territorio fueron también el año pasado la principal causa de las sanciones.
"El nuevo material permitirá que se detecten otro tipo de infracciones", afirmó el coronel de la Guardia Civil en Extremadura, Alejandro Maldonado. La dotación a la que se refería son seis lanchas tipo zodiac, seis remolques para su transportes y seis vehículos todoterreno que la Confederación Hidrográfica del Tajo ha proporcionado a la benemérita para mejorar la protección de los embalses de la cuenca en la provincia de Cáceres. Concretamente los equipos estarán en los embalses de Torreón Tajo, Valdecañas, Torrejón, Gabriel y Galán, Alcántara, Cedillo, Borbollón y Alcántara, aunque se moverán por toda la cuenca.
PROTOCOLO La entrega materializa el protocolo suscrito en el 2007 por los ministerios del Interior y Medioambiente con la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) para mejorar la vigilancia sobre la cuenca en cuestiones como la extracción ilegal de áridos, pozos ilegales, autorizaciones de navegación de los embalses y vertidos incontrolados. Por ese motivo junto a los equipos, el centenar de agentes el Seprona han recibido un curso en el que han aprendido a utilizar los equipos de detección de vertidos que llevarán en ahora.
"Como consecuencia de los nuevos equipos los agentes del Seprona podrán detectar otro tipo de infracciones por lo que es posible que se incrementen o aparezcan otras nuevas", aventuró Maldonado.
Por su parte del presidente de la CHT, José María Macías, destacó que la labor que los agentes del servicio de protección de la naturaleza en el Tajo "redunda en un mejor medioambiente, una mejor calidad del agua y un mejor servicio al ciudadano", dijo.
