La patronal agraria y los sindicatos siguen sin llegar a un acuerdo en el convenio del campo, aunque sí se ha producido un avance de posiciones respecto a la vigencia del mismo, ya que las partes coinciden en que tenga un año de duración. Empresarios y sindicatos se emplazan para una próxima reunión el 3 de junio.

Bibiano Serrano, presidente de Apag, reconoce que el mayor escollo es el referido a la subida salarial y la cláusula de revisión salarial del 0,75% en caso de que el IPC subiera un 0,80, ya que las Opas quieren la "congelación salarial". Santiago Candelo, de CCOO, dice que los sindicatos no pueden aceptar esa propuesta.

El presidente de Apag se muestra dispuesto a "ceder" hasta dar con un acuerdo que satisfaga a todas las partes y que contribuya a dar estabilidad al sector, pero considera que "no se puede ir contracorriente" mientras se está hablando de congelación para las pensiones y rebaja en los sueldos de los funcionarios.

Por su parte, el secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas, reiteró que la organización que representa hará los "máximos esfuerzos" para llegar a un acuerdo en un sector que califica de los más "importantes" y "estratégicos" de la región, porque afecta a 70.000 trabajadores y a más de 17.000 agricultores y ganaderos que se acogen como empresarios.

Huertas aboga por que la periodicidad del convenio sea anual, por lo que recalcó que la propuesta de su organización es cerrar un acuerdo para 2010 "exclusivamente" y a posteriori poder hablar de "otro horizonte temporal".

El representante de CCOO también está dispuesto a que el convenio tenga una periodicidad anual, "pero no aceptamos la congelación salarial. Sería el primer convenio de la región firmado con esas condiciones, porque el viernes se firmó el de panadería y el incremento firmado fue superior al 1%". Candelo recuerda también que "un 0,8% sobre un salario medio de 700 euros no lleva a la patronal a ninguna parte".

El portavoz del PP, Luis Alfonso Hernández Carrón, también terció ayer en el asunto y reclamó que el convenio colectivo del campo que se firme permita que este sector "sea económicamente viable, y socialmente sea también una apuesta para el futuro y para el empleo". La propuesta del PP pasa por que "se ligue la viabilidad del convenio en función de la evolución de la renta agraria de Extremadura".