Placentinos y turistas contemplaron ayer el primer paso que desfila bajo palio de la Semana Santa local. La Virgen María Santísima del Rosario en su Mayor Dolor estrenó un espectacular palio realizado con bambalinas de malla de oro bordadas en hilo del mismo material y techo de terciopelo granate, que levantó elogios entre el numeroso público que se congregó en la zona centro de la ciudad para ver una de las procesiones más multitudinarias.

Unos 700 cofrades de todas las edades desfilaron acompañando a Nuestro Padre Jesús de la Pasión --paso titular de la cofradía con 51 hermanos de carga, en turnos de 32-- y la Virgen del Rosario, con un total de 66 hermanos de carga.

Al primero le escoltó además la policía local, patrón de la hermandad, mientras que la guardia civil hacía lo propio con la Virgen. El palio que lució es obra de José Antonio Grande de León y la sección de bordados de la propia hermandad y se ha realizado en la orfebrería sevillana de Manuel de los Ríos.

Pero además de éste y otros muchos estrenos, la música ocupó también un lugar destacado en esta procesión del Lunes Santo con la presencia de la banda de cornetas y tambores Jesús Nazareno de Cáceres, que marchaba detrás del paso titular de la hermandad mientras que la banda Rincón Cofrade de Salamanca seguía a la Virgen.

El tiempo acompañó y la ciudad se engalanó ayer para esta procesión, de forma que banderas verdes, el mismo tono del hábito de los cofrades, lucían en numerosos balcones, sobre todo de la plaza Mayor.