La Guardia Civil ha detenido al presunto autor de un incendio provocado en un reptilario de Berlanga en el que murieron 100 animales de diferentes especies. A este joven se le podrá aplicar la Ley Animal de Extremadura, que para este supuesto establece sanciones económicas de entre 1.501 y 15.025 euros.

Según el relato de la Guardia Civil, el detenido, R. M. M., vecino de Berlanga, es responsable de los robos e incendios ocurridos en las últimas semanas en el parque Las Quinientas, muy próximo a esta localidad pacense. Así, a finales del mes de diciembre habría provocado un incendio que afectó a dos edificios de madera, uno de los cuales funcionaba como reptilario y otro dedicado a una sala de proyecciones relacionadas con la naturaleza. En el reptilario fallecieron cien animales de distintas especies, como arácnidos, reptiles y peces, mientras que en la sala de proyección el fuego causó daños valorados en más de 84.000 euros.

ROBOS

Asimismo, se le considera responsable de cometer--en la misma semana-- dos robos en una nave de los invernaderos situados en la N-432, donde cortaron la valla del perímetro, forzaron una ventana interior y se apoderaron del dinero existente.

El último ataque tuvo lugar el 3 de enero, cuando estos mismos invernaderos sufrieron un incendio en el que quedaron destruidos un frigorífico, una balanza de precisión, una caja de herramientas, un taladro, un programador de riego, 700 plantas de invernaderos y otros objetos, todo ello valorado en unos 7.667 euros. Como consecuencia de este incendio también se vio afectada la producción de tomate, que sufrió daños por 9.000 euros.

Tras la correspondiente investigación la Guardia Civil detuvo a R. M. M. como autor de los hechos, y tanto las diligencias como el detenido fueron puestos a disposición del juzgado de Llerena.

Con todo esto, el joven podría tener que hacer frente a daños por valor de más de 100.000 euros (más de 16,6 millones de pesetas). A esto podría sumarse la sanción por falta muy grave prevista para estos casos --provocar la muerte de animales-- por la Ley Animal de Extremadura aprobada por el Parlamento regional en mayo del año pasado. En concreto, la norma contempla unas sanciones que oscilan entre los 1.500 y los 15.000 euros.