Afronta uno de los retos más importantes de su vida política, pero no el mayor, asegura José Angel Calle Grajera, el candidato socialista a la Alcaldía de Mérida, que tiene 51 años, es profesor de instituto desde hace treinta años, y vive en Mérida desde 1977. En su tiempo libre prefiere estar con amigos, pasear y leer, algo que muy probablemente hará el día 25 de mayo hasta conocer el veredicto final de las urnas. Sea cual sea ese resultado, insiste, seguirá en política, en las filas del PSOE.

Hasta ese día, espera que sea una campaña limpia, o al menos así la ha planteado su grupo, indica. En todo caso, será intensa, porque tiene una media de dos actos diarios por barriadas, para cerrar sus actos públicos el 22 de mayo con un acto en el hotel Las Lomas donde estará acompañado por el presidente de la Junta, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, y el exvicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra.

¿Qué espera en esta campaña?

--Nosotros estamos muy esperanzados en el trabajo que estamos haciendo y notamos una cierta complicidad con la gente, que te para por la calle y te desea suerte y que el sentimiento de cambio en la ciudad lo estamos encarnando con cierta dignidad. Vamos muy esperanzados con el resultado que pueda ocurrir el 25 de mayo.

Las encuestas siempre dan ganadores y nunca perdedores, según las versiones de partido. En su caso, cómo están los sondeos

--En la última a la que he tenido acceso nos da una ventaja de tres puntos sobre el PP en intención directa de voto, aunque desconozco la cocina de esta encuesta. Las encuestas marcan tendencias y estamos notando que la gente nos está pidiendo cosas que no se ven, pero que son enormemente necesarias en materia de empleo y vivienda para los jóvenes o guarderías. Creo que el ciclo del PP se ha agotado en la ciudad de Mérida y los ciudadanos así nos lo hacen ver. Pero, insisto, hasta la semana que viene no conoceremos los resultados de una encuesta que hemos hecho, y que nos los darán el jueves o el viernes próximo.

¿Es el reto más importante en su carrera política?

--No, el reto más importante fue la lucha por la libertad en la época de Franco, que me costó seis meses de cárcel. Este es muy importante, pero aquel lo fue más no sólo para mí, sino para toda España.

Sin embargo, dicen los políticos que no hay nada más gratificante que ser alcalde del lugar donde uno vive

--Yo creo que sí, la política municipal es la más cercana al ciudadano y los ciudadanos quieren que sus políticos sean gente cercana, que le escucha, que le ponga el hombro para que lloren sobre él, con la que poder hablar. Es la mejor política y la más difícil. Para mí sería una satisfacción enorme ser alcalde de esta ciudad, donde he hecho de todo, desde repartir octavillas en La Paz en el año 1979 hasta todo tipo de cuestiones. Son los ciudadanos los que no se deben dejar engañar por estas obras de última hora, que no son prioritarias muchas de ellas, por tanta palmera y tan poca guardería. Más que un orgullo, sería una satisfacción y una responsabilidad enorme.

Cuáles son las principales diferencias entre lo que ofrece el PSOE respecto a los otros partidos políticos?

--La diferencia clara entre la política de izquierda y derecha, que es hacer un tipo de política que resuelva los problemas de la gente, con su participación. Soy enemigo y detesto las políticas que están diciendo a la gente de Mérida que es tonta, porque te doy una obra ahora y me vas a votar, te estoy poniendo cuatro palmeras y me vas a votar.

Nuestra diferencia es que queremos gobernar para la gente que más lo necesita, para la inmensa mayoría; una política más cercana. Además, con valores de la paz, el diálogo, y este alcalde propicia la bronca y el enfrentamiento continuo, algo que perjudica a la ciudad.

¿Cómo vivirá el día 25 de mayo?

--Con la lógica intranquilidad que te da el saber que la gente te puede votar o no, pero tenemos una enorme tranquilidad que si nos votan, muy bien, y si no, también.

¿Y el día después?

--El día 26 de mayo estaré en el instituto evaluando a los alumnos, independientemente de que haya ganado o no, y estaré más feliz y tendré más responsabilidades y, en todo caso, le daré las gracias a los ciudadanos por su participación.

¿Qué pasará si pierde?

--Nunca le echaré la culpa al pueblo, si pierdo las elecciones será porque no habré hecho las cosas bien o porque mi mensaje no ha llegado a los ciudadanos o simplemente era equivocado, pero la gente no se equivoca cuando vota. En todo caso, seguiré en política, en el partido socialista y fiel a las ideas progresistas que he tenido siempre.