La Denominación de Origen Ribera del Guadiana controló esta pasada vendimia 76,4 millones de kilos de uva, lo que supuso un 26% de incremento respecto a los 60,6 del año anterior, conforme a los datos facilitados por el consejo regulador de este marchamo de calidad extremeño. También aquí el incremento de producción se justifica por la incorporación de nuevos viticultores y de superficie en reestructuración.

En relación al estado sanitario de la uva, desde esta entidad se explica que en general, "el viñedo ha presentado un buen aspecto con una abundante masa foliar que ha permitido una adecuada maduración y por tanto una buena calidad de la uva". En total se ha efectuado control de vendimia a cuarenta bodegas acogidas. El 71,12% de la uva verificada correspondía a las variedades tintas y el 28,88% restante a las blancas. Entre las primeras destaca la tempranillo, que supone el 60,5% de la producción de la denominación de origen. Le siguen en orden de importancia las variedades blancas autóctonas pardina y cayetana blanca que entre las dos suman el 21,71%.

"Las primeras calificaciones de expedientes de vino tinto han dado como resultado una calidad excelente, en cuanto a características organolépticas de los vinos", se asegura desde el consejo regulador.