Casi 90.000 extremeños enfermos, 25 días al año perdidos de trabajo por baja productividad, 50.000 personas con dolores de cabeza más de quince días al mes y más incidencia en las mujeres que en los hombres. Estos son solo algunas cifras de la prevalencia de la migraña (comúnmente llamada jaqueca) en Extremadura. Se trata de una enfermedad neurológica crónica, caracterizada por intensos dolores de cabeza, que afecta al 12% de la población extremeña de entre 18 y 65 años y que en el 80% de los casos incapacita a los afectados en su tarea diaria durante uno o dos días.

Los datos, ofrecidos ayer por José Javier Aguirre, neurólogo del hospital Infanta Cristina de Badajoz, han sido sacados de la encuesta Palm 2006 sobre migraña del Plan de Acción en la Lucha contra la Migraña. Este experto destaca la importancia de los tratamientos médicos para paliar los efectos de la enfermedad, pero aclara que más de un 22% de los extremeños no acude al médico para ser atendidos de sus dolencias, sobre todo las mujeres, las más afectadas (el 17%), frente a un 8% de hombres, debido a que sufre estrés laboral, familiar y social, la principal causa de la aparición de migraña.

Pero esta causa no es la única. Los cambios en la climatología también influyen en la aparición de los dolores fuertes de cabeza, por eso "en verano suele haber más consultas, ya que el calor produce más migraña", comenta Aguirre.

Esta enfermedad, que es hereditaria, provoca que algunos enfermos no acudan al médico, y combatan la dolencia "acostándose en una habitación a oscuras y sin que les moleste nadie". Sin embargo, al margen de los fármacos adecuados, "comer bien, hacer ejercicio, evitar el estrés y realizar actividades" pueden ayudar a paliar sus efectos.

Además de las consecuencias para la calidad de vida, los efectos de la migraña se ven directamente asociados también a nivel laboral, ya que el absentismo en el trabajo representa 2,5 días de baja al año, más otros 25 días con baja productividad, en los que el migrañoso acude al trabajo con dolor de cabeza, y su efectividad se reduce al 61,3%. Esto se traduce a nivel nacional en unas pérdidas anuales de 1.800 millones y se pierden más de 16 millones de jornadas laborales.

En España, más de 3,7 millones de personas sufren migraña.