Las donaciones de sangre se acercan en 2008 al récord de las 47.100 bolsas

La falta de personal sanitario para cubrir bajas, descansos y vacaciones, junto a la incidencia de puentes y festivos en mitad de semana, originaron que durante el 2007 las donaciones se redujeran de 47.104 (dato del 2006 y techo histórico de donaciones en la comunidad autónoma) a 45.871. Pero ese terreno se ha recuperado este año, según el director del Banco de Sangre de Extremadura, José María Brull. A finales de noviembre este organismo público ya había alcanzado las 43.332 bolsas y ahora calculan estar por encima de las 47.000. Pero el dato definitivo no se sabrá hasta los próximos días, cuando Brull y su equipo hagan balance una vez superadas las fiestas navideñas.

"Estamos satisfechos. Los problemas siguen ahí, porque la falta de médicos (para realizar las extracciones debe haber al menos un médico) es generalizada en toda la Sanidad. Y contra la costumbre de la gente de ir menos a donar durante los puentes no podemos hacer demasiado. Este año vamos a subir en unas 1.200 donaciones porque ya estábamos avisados. Lo del 2007 nos puso en sobreaviso y hemos hecho una planificación para aprovechar mejor los recursos", explica el responsable del Banco de Sangre.

De hecho, las cuatro unidades móviles con las que cuenta este organismo han realizado una veintena de colectas menos que el año pasado. Pero a diferencia de lo que ocurrió entonces, casi ninguna ha sido forzada por carencias de personal. Era parte de la programación prevista. "Lo que hemos hecho ha sido reservar recursos humanos para concentrar esfuerzos en las localidades donde logramos más donaciones", precisa.

El resultado de todo ello es que no ha habido carencias en ninguna época del año ni de ningún grupo, aunque sí algún "bache" en octubre por una baja en el equipo --formado por casi medio centenar de personas, principalmente médicos y enfermeros-- y las dificultades para cubrirla. Según Brull, "hemos tenido para cubrir nuestras necesidades y algo para las peticiones que nos han llegado desde Madrid, sobre todo, y en menor medida de Andalucía y Castilla y León". En este sentido la ayuda entre comunidades autónomas es continua. Este año (2008) han salido hacia hospitales madrileños o andaluces cerca de 5.000 bolsas y 100 a Castilla y León. Eso supone algo más del 10% de las extracciones de la región. El motivo, las carencias de donaciones, la mayor actividad hospitalaria, la alta siniestralidad o los sucesos excepcionales en estas comunidades. El Banco de Sangre de Extremadura, por ejemplo, envió a Madrid 120 unidades sanguíneas tras el accidente aéreo de Barajas.

DAR Y RECIBIR "No solo es una obligación moral. En este tema no hay barreras autonómicas. Allí donde se necesita, si podemos, ayudamos. Y al revés. Este año la Comunidad de Madrid nos mandó, para un paciente extremeño, un tipo de plasma muy concreto que nosotros no producimos", defiende Brull.

Con las 4.700 donaciones estimadas para este 2008, Extremadura volverá a situarse entre los territorios con mayor tasa: unas 42 por cada 1.000 habitantes. La media española es de 37,30. Por encima de la región solo están Navarra, País Vasco y Galicia.

A pesar de los datos positivos del 2008, Brull insiste en que la población no debe bajar la guardia. Ni el 31 ni el día 1 ha habido colectas, ni tampoco durante los fines de semana. Pero las plaquetas, una de las sustancias que se obtienen de las donaciones, caducan a los cinco días. Es decir, las extracciones obtenidas el martes 30 serán inservibles a partir del domingo. "El problema es que haya algún suceso que dispare la demanda, ahí sí podemos pasar dificultades", subraya. Por ello anima a los ciudadanos a que sigan realizando sus aportaciones solidarias y no se dejen extasiar por el buen balance provisional. "Lo que hoy está bien en cuestión de días se puede complicar. Por eso necesitamos la ayuda de todos".