La última operación del Seprona en Zarza la Mayor llega cuando aún resuenan los ecos de la llamada Operación Safari , desarrollada en Monterrubio de la Serena y en la que se detectó una finca en la que se celebraban cacerías de lobos, tigres y leones. En aquella ocasión los lobos tenían el pasaporte falsificado y llegaban de Burgos y Cataluña, entre otros sitios, mientras que los tigres y los leones era unos sin papeles , como los antílopes de Zarza la Mayor.

La Operación Safari concluyó con 7 detenidos --el dueño de la finca en la que se celebraban su cacerías, su hijo, dos guardas, un matrimonio y un presunto intermediario-- aunque la Guardia Civil avisó de que no se ha llegado a cerrar.

Y es que el caso ha pasado al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número dos de Castuera, donde el juez ya ha empezado a tomar declaración a los inculpados, y de forma paralela se espera identificar a algunas de las personas que participaron en esas cacerías ilegales. Los rostros de estos cazadores aparecen en las fotografías intervenidas en los registros realizados por los agentes en las propiedades del acusado de organizar estas actividades.

Ya entonces hubo voces criticando el escaso control sobre el tráfico de animales protegidos, pero sigue habiendo quien juega a mover ejemplares sin papeles .