Ecologistas en Acción reclama que se sancione a los responsables de la Central Nuclear de Almaraz por "degradar las medidas de seguridad" en el incidente de ayer, que afectó al sistema de refrigeración de la piscina de almacenamiento del combustible gastado. Según señala esta organización a través de la agencia Europa Press, esta "avería se agravó al estar fuera de servicio por mantenimiento la bomba auxiliar, por lo que la temperatura del agua aumentó más allá de los niveles normales, aunque siempre por debajo de los permitidos". La organización indica que la refrigeración del combustible gastado es "fundamental porque éste desprende una gran cantidad de calor cuando se extrae del núcleo de la central" y, por ello, alerta de que "una refrigeración insuficiente podría hacer que la capa de agua que actúa como blindaje no sea lo suficiente gruesa y se emita radiactividad al exterior". Asimismo, los ecologistas recalcan que la bomba empezó a funcionar a tiempo para "evitar un desastre", pero lamentan que "durante un tiempo indeterminado el combustible permaneció con refrigeración insuficiente lo cual supone un riesgo inadmisible de escape de la radiactividad de la piscina". Por todo ello, consideran que "claramente se ha producido una maniobra que ha violado la seguridad de la central al poner en mantenimiento una bomba sin garantizar antes que no iba a ser necesaria" y exigen al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) que "investigue con rigor si se ha producido una dejación por parte de los explotadores, que ha conducido a una situación de inseguridad. Y que ésta sea castigada con rigor".