La Junta de Extremadura no podrá pagar los 90.000 euros que reclama el representante del líder de Extremoduro, Robe Iniesta, por el patrocinio de su disco en solitario, ya que el anterior ejecutivo regional, presidido por José Antonio Monago, no formalizó contrato alguno, por lo que deberá recurrir a los tribunales.

El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha dado a conocer este caso como un ejemplo de "las mentiras" y "el desastre" de la gestión que llevó a cabo en anterior ejecutivo, que por una parte proclamaba la reducción del déficit y por otro acumulaba facturas impagadas.

"En la Extremadura de ahora no puede ser que Robe Iniesta esté esperando para cobrar, se contrató a ese señor sin que hubiera contrato, hay que ingresar mejor y gastar mejor y esto no lo quieren entender", ha señalado Fernández Vara.

Según Fernández Vara, aunque lo siente "en el alma" la administración no puede abonar algo de lo que no hay contrato y ha atribuido a que se hicieran los conciertos sin estar firmado el contrato a que "alguien le prometería tira para adelante que ya lo aclararemos".

El presidente extremeño ha criticado que "mientras se estaba diciendo que se reducía el déficit, se condenaba a montones de proveedores a no cobrar" y ha indicado que su gobierno tiene la obligación de pagarle a la gente a tiempo y conseguir que en esta región no haya que llevar al Consejo de Gobierno facturas de 2012 y 2013 a convalidar para ser pagadas.

Vara, que no ha cuantificado el montante de facturas impagadas "que están saliendo todos los días", ha asegurado que en el anterior ejecutivo, "se tomaban decisiones y después en las consejerías no se llevaban a cabo y nos vendían la burra".

A su juicio, el PP "es una profunda mentira", porque no se puede estar diciendo que se han bajado impuestos y que haya habido que el Servicio Extremeño de Salud (SES) haya tenido que pagar la semana pasada 700.000 euros de intereses de demora, que serán tres millones de euros en el año.

Ha insistido en que la reforma fiscal que Monago anunció en febrero se tomó después de que se decidiera que no ingresarían más extremeños en lista de espera, con lo que "condenó a 100.000 personas a no aparecer en ninguna lista".

Fernández Vara ha dicho que "el negocio de la sanidad privada nunca estuvo tan prospero como ahora" y ha advertido de que por eso el PP ha introducido una enmienda en los presupuestos del Estado para que desgraven las pólizas privadas, con lo que se muestra que "todo cuadra, el PP es un partido al servicio de los negocios".

Por ello, ha agregado que el debate no es si se suben o no los impuestos sino si la sanidad es sostenible y ha abogado por hablar con transparencia a la gente "y si esto es un desastre y si la sanidad está en peligro porque los proveedores dejen de suministrar hay que decirlo porque esa es la herencia que ha dejado Monago y Carrón".