--¿Cómo le afecta a una ama de casa la política europea?
--Principalmente con decisiones como el euro y en protección sobre el consumidor.
--¿Y qué le parece esa gestión?
--No veo que la política que se está llevando a cabo en Bruselas nos beneficie mucho porque siempre somos los más desprotegidos. No es suficiente.
--¿Y la implantación del euro?
--Es horrible, con el cambio de moneda no hemos avanzado nada. Nuestro sueldo no está equiparado al de la Unión Europea y eso ha encarecido los precios en la región, aunque el consumidor tiene parte de culpa, llevamos una vida muy alegre .
--La garantía que ofrece Europa al consumidor, ¿es suficiente?
--No me fío de los controles de calidad porque siempre hay alarmas que te hacen dudar: el aceite de girasol, los zapatos contaminados,... Deben mejorar en este aspecto y apostar por productos ecológicos y menos química.