«Les suena el WhatsApp y a correr. No pueden planificar sus vidas, no pueden conciliar, viven pendientes del teléfono, son esclavas del sistema. Han venido profesionales llorando porque no pueden más», denuncia Damián Cumbres, secretario autonómico del Sindicato de Enfermería Satse de Extremadura.

El colectivo ha trasladado a la Inspección de Trabajo la situación que viene sufriendo un grupo de medio centenar de enfermeros, mujeres principalmente. Son temporales, no tienen planillas de trabajo ni mensuales ni mucho menos trimestrales -como marcan los acuerdos laborales- y frecuentemente son avisadas por WhatsApp y con poca antelación sobre la jornada de trabajo que tendrán en las próximas horas, a veces hasta con solo dos horas de antelación. «Mensajes que se envían tanto de día como de noche», prosigue el sindicato.

Dice que la situación es «vergonzosa» en el complejo hospitalario de Badajoz, que incluye los hospitales Infanta Cristina, Perpetuo Socorro y Materno Infantil, pero Satse está investigando también la situación de estas trabajadoras en el resto de áreas hospitalarias. Desde un colectivo de profesionales ya avisan de que la situación no es exclusiva en Badajoz.

De momento, la denuncia de Satse interpuesta ante la Inspección de Trabajo se refiere solo a la situación del complejo pacense y se ha alertado también al Servicio de Prevención de Riesgos Laborales. El sindicato urge al gerente de dicho área que exija a los servicios centrales del SES «presupuestos reales» para cubrir la «escasez» de profesionales de la enfermería. Reclama también que se abra una investigación para depurar responsabilidades «de quién esté permitiendo por acción u omisión que en pleno siglo XXI se explote a la enfermería», denuncia Cumbres.

Cubrir los huecos

Este grupo de unas 50 profesionales temporales conforman una lista denominada pool, suelen estar disponibles las 24 horas del día para cubrir los huecos en los distintos servicios hospitalarios según las necesidades, normalmente para ayudar en momentos de gran carga de trabajo o asumir tareas de profesionales de enfermería ausentes. Pero además, Satse denuncia, que no se tienen en cuenta el descanso de estas profesionales, ni semanales, ni por salientes de guardia ni de 12 horas entre jornada y jornada. «Hay enfermeras que han trabajo hasta 18 días seguidos». «Todo esto está produciendo que dichas profesionales no puedan organizar y conciliar su vida familiar, laboral... sean actualmente las esclavas del sistema y está ocasionando bajas por estrés laboral», advierten desde el sindicato extremeño.

A esta situación añaden otras circunstancias que padece este colectivo: «se le adeudan días libres y de permiso del año 2017, no se contrata personal de enfemería para sustituir las bajas por incapacidad temporal...»