Los universitarios se lamentaron el pasado martes de que las becas siguen sin llegar y que hay alumnos que necesitan ese dinero --y no lo pueden adelantar-- para poder continuar con su carrera. La protesta la dirigieron directamente a la Junta de Extremadura, porque lo que esperan son las ayudas complementarias que la Consejería de Educación aporta a aquellos estudiantes que por nota media no han podido optar a la del Estado. Y el temor de los afectados es que ocurra lo mismo que el pasado año, que este apoyo económico llegue en agosto, con el curso ya terminado.

Ante esta situación la Junta respondió que los plazos de este año están siendo los correctos y que para ellos poder empezar a tramitar expedientes deben esperar a que el Ministerio de Educación resuelva primero sus propias becas. Ayer desde la Administración regional volvieron a insistir en que los tiempos se están cumpliendo tal y como estaba previsto, «con toda normalidad». «Pero es que estamos casi en mayo y el dinero no ha llegado, obviamente no son los plazos correctos», no se cansa de repetir Mercedes Borrasca, miembro de la Asamblea Universitaria Badajoz y del Consejo de Gobierno de la Uex.

El escudo de la Junta en el Ministerio de Educación para justificar que los alumnos no han recibido aún las becas complementarias porque debían esperar a que éstas se resolvieran en Madrid -«el año pasado le echaron la culpa a que no había presupuestos», asegura Borrasca- ha indignado a la Delegación del Gobierno en Extremadura. Desde esta entidad acusaron ayer a la Junta de «jugar con una cuestión tan sensible como estas ayudas». «El 88,9% de los becarios (6.984) recibieron sus cuantías fijas antes del 23 de enero de 2017. Las 870 restantes (alegaciones y solicitudes de aumentos de cuantía) se resolvieron antes del final del mes de marzo», afirmaron. «A fecha de hoy todas las becas han sido notificadas y pagadas», añadieron.

Desde la Consejería de Educación y Cultura insisten en que «ni la Junta ni el ministerio está faltando a la verdad sobre este asunto» pero que hay trámites que se deben cumplir y por ello todavía no ha llegado un dinero que los alumnos emplean, entre otras cosas, en pagar el alquiler, el transporte y la manutención.

La portavoz de los estudiantes de la Uex subraya que el retraso supone «abandono de estudios, endeudamiento de familias o trabajos precarios».