El 30 por ciento de los extremeños ahorra para su jubilación, un porcentaje que ha bajado ocho puntos en un año y que está cinco puntos por debajo de la media nacional, según las conclusiones del Segundo Observatorio de Pensiones sobre Extremadura elaborado de la compañía aseguradora Cáser y que recoge la agencia Efe. El director de este observatorio, Manuel Álvarez, aclara que el estudio se basa en una muestra de 4.100 entrevistas en España, de las que unas 450 se han llevado a cabo en Extremadura.

Álvarez subraya que la investigación pone de relieve que tanto en el ámbito nacional como regional la crisis económica ha favorecido el ahorro, pero sólo a corto plazo, por lo que pueda pasar en una situación como la actual, mientras que incide de manera negativa en el ahorro finalista.

Entre las razones que los extremeños exponen para no ahorrar, un 76,4 por ciento asegura que le es imposible, un porcentaje que está por debajo de la media nacional, del 80,2 por ciento, pero que ha aumentado siete puntos con respecto a la muestra del año pasado.

Entre las excusas para no ahorrar para la jubilación, el director del observatorio ha resaltado que un 68 por ciento de los extremeños se escudan en su confianza en la Seguridad Social como institución, un dato que ha considerado especialmente significativo en el caso de la región, ya que está casi diez puntos por encima de la media nacional.

La confianza en la familia también es superior en Extremadura respecto del resto de España, ya que 38,5 por ciento de los extremeños frente al 33,7 por ciento de los españoles alude a esta excusa para no ahorrar de cara la jubilación, ya que consideran que sus familiares les ayudarán en caso de necesitarlo.

También un 58,5 por ciento de los extremeños considera que aún es joven para pensar en planes de pensiones, frente al 46,3 por ciento del resto de los españoles.

Con respecto a la imposibilidad para ahorrar, la inestabilidad en el empleo y el incremento del paro son las circunstancias más aludidas y así un 81,3 de los extremeños señala que son las razones laborales las que le impiden ahorrar a largo plazo, un porcentaje que ha sufrido un gran incremento en la región, ya que en 2008 se situaba en el 55,1 por ciento.

La siguiente razón es la de tener muchos gastos, citada por un 52,8 por ciento de los encuestados en Extremadura; seguida de la hipoteca, con un 46,6 por ciento, un porcentaje en este último caso mucho menor que en el conjunto de España, donde el 62 por ciento citan el crédito hipotecario como motivo que impide el ahorro.

El estudio valora también la situación de quienes sí cuentan en la región con sistemas de ahorro privado para su jubilación y, en ese sentido, destaca que el 94,1 por ciento de ellos intentarán este año ahorrar lo mismo que en años anteriores, a pesar de la crisis, un porcentaje que se sitúa muy por encima de la media nacional.

Asimismo pone de relieve que el 80 por ciento de quienes ahorran para su jubilación lo hacen a través de planes de pensiones, aunque existen otros instrumentos para ello.

La investigación hace hincapié, además, en otras cuestiones, como las percepciones de la Seguridad Social o las medidas que se esperan para mejorar el ahorro.

Así, el 25 por ciento de los extremeños dice saber cuál es la cuantía media de una pensión de jubilación, frente al 22 por ciento nacional y cuando en 2008 no llegaba al ocho por ciento de los que afirmaban saberlo.

Sin embargo, el Pacto de Toledo es desconocido por la gran mayoría de los extremeños, al igual que para el resto de los españoles, y así lo reconoce el 95 por ciento de los encuestados.

Con respecto a las medidas esperadas para mejorar el ahorro, un 34,7 por ciento de los encuestados en Extremadura apuesta por promover el ahorro de las empresas, una "asignatura pendiente en España", según Álvarez; seguido de un 34,6 por ciento que propone mejorar la fiscalidad, y un 30,7 por ciento que se muestra a favor de promocionar este ahorro mediante campañas de concienciación y comunicación.