El exceso de nutrientes perjudica la calidad del hueso, según un estudio elaborado por el Grupo de Investigación de Enfermedades Metabólicas Oseas de la Universidad de Extremadura (Uex), encabezado por el catedrático Juan Diego Pedrera.

El trabajo de los investigadores destierra muchas de las informaciones que bombardean la vida diaria del consumidor y concluye que debe existir un equilibrio entre los distintos factores que forman parte de la vida diaria de los individuos para que puedan gozar de buena salud.

Según el estudio, el hueso se encuentra en gran medida determinado por factores hereditarios, como aspectos raciales y familiares, pero la calidad y cantidad ósea también depende de otros condicionantes, principalmente de tipo nutricional, y del estilo de vida que lleven a cabo las personas.

"Tomar calcio es bueno para los huesos siempre que no tomemos más de dos gramos al día, si ingerimos más cantidad tenemos un mayor riesgo de sufrir fracturas de cadera, ya que los huesos se hacen más frágiles", ha explicado el profesor Juan Diego Pedrera.

Sin embargo, añade, en la actualidad las campañas publicitarias invitan al consumo abusivo de calcio, se venden todo tipo de lácteos, zumos y margarinas con la idea equivocada de que benefician a la salud cuando por el contrario la pueden llegar a perjudicar gravemente.

En los hombres, por ejemplo, la ingesta excesiva de calcio multiplica los riesgos de padecer cáncer de próstata. En cuanto a las proteínas, el exceso de calorías también tiene efectos negativos sobre el hueso.

El Grupo de Investigación de Enfermedades Metabólicas Oseas recomienda mantener una alimentación adecuada y equilibrada. Además, los hábitos de vida saludables, como el ejercicio físico y no consumir alcohol ni tabaco, permiten mantener adecuadamente la salud de los huesos.