Veintidós de cada cien accidentes de tráfico registrado en Extremadura se deben a un exceso de velocidad. La comunidad extremeña, junto a Murcia y la Comunidad Valenciana, son las regiones españolas en la se da un mayor número de siniestros por sobrepasar los límites de velocidad. En el lado opuesto se encuentran Asturias, Madrid y Baleares, todas por debajo del 14% en accidentes vinculados a esta causa.

A pesar de este dato, Extremadura se encuentra entre las cinco comunidades en las que se da un menor porcentaje de conductores accidentados por infracción de velocidad en las carreteras, 17 de cada 100. La región se sitúa a ocho puntos porcentuales de Galicia. En las carreteras gallegas, uno de cada cuatro conductores accidentado es debido al exceso de velocidad en la conducción de su vehículo.

Según el estudio Influencia de la velocidad en los accidentes de tráfico , elaborado por Línea Directa Aseguradora y el Instituto de Tráfico y Seguridad Vial (Intras), el 37% de los accidentes mortales de tráfico se deben a la velocidad. Cada año, 1.700 personas fallecen en España en los más de 20.000 accidentes con víctimas que se registran por este motivo.

Unos datos que quedan refrendados con la estadística sobre siniestralidad vial de la última Semana Santa. La Dirección General de Tráfico (DGT) ha confirmado que la velocidad inadecuada y la distracción del conductor fueron las causas principales de los accidentes mortales durante este periodo vacacional, en los que además el 49 por ciento de los fallecidos no usaba cinturón de seguridad.

Por motivos, el exceso de velocidad fue la causa del 28,41% de los percances, la distracción del 23,86%, y las maniobras antirreglamentarias del 14,77%.

Esta estadística varía si se toma como referencia el año 2004 en su conjunto. Según la DGT, la velocidad inadecuada fue el segundo factor que más concurrió en los accidentes con víctimas mortales ocurridos durante el pasado año, sólo por detrás de la distracción del conductor (26,9%) y antes que las maniobras antirreglamentarias (15%), las invasiones del carril de la izquierda (7,6%), la irrupción de peatones (7,3%) o la somnolencia (4 por ciento).

EL ESTUDIO, EN CIFRAS Esta investigación de la compañía aseguradora toma como base de trabajo los partes de la Dirección General de Tráfico en el periodo entre 1999-2003 y del mismo se deriva que los principales infractores de los límites de velocidad son jóvenes de entre 18 y 25 años de edad, el 26,6% de ellos con un permiso de conducir de menos de dos años de antigüedad. Un dato significativo: El perfil de estos jóvenes representa al 35% de los conductores accidentados, aunque sólo al 18% de la población.

De este estudio también se deriva que la principal causa de este tipo de accidentes no es sólo por conducir a una velocidad excesiva, sino hacerlo de una forma inadecuada a las condiciones del entorno. Ocho de cada diez siniestros de este tipo se debe a que el conductor no adapta su conducción a las circunstancias y condiciones que le rodean.

En ese sentido, cuando las condiciones atmosféricas empeoran, la velocidad cobra un papel relevante. Los factores climatológicos que más afectan a la conducción son el granizo y la lluvia. Además, también existe una clara relación entre las infracciones por velocidad y la ingestión de alcohol u otras sustancias.

Esta última causa ha llevado a la Junta de Extremadura a diseñar una campaña, --dirigida principalmente a los jóvenes de la región--, para intentar sensibilizar sobre los riesgos de la conducción bajo los efectos del alcohol. Este es además uno de los objetivos prioritarios que se ha marcado la Consejería de Sanidad y Consumo dentro del Plan de Salud de Extremadura 2005-2008.