Galisteo tiene la mayor superficie nacional destinada al cultivo de soja no transgénica destinada a productos alimentarios "funcionales" ya que destina a esta producción 300 de las 600 hectáreas del país, se señala en el último de la revista "Caudal de Extremadura".En el artículo "El Grupo Leche Pascual concentra en el norte de Cáceres el suministro de soja para sus lácteos", recogido por EFE, se explica que "los grandes grupos lácteos han convertido a la soja en el gran reclamo comercial de sus nuevos lanzamientos, tanto de leche como de yogures y otros alimentos funcionales".En este sentido, se continúa, estas firmas comerciales necesitan disponer de materia prima suficiente de soja "de garantía" que no provenga de cultivos transgénicos y "Extremadura parece haberse convertido en el territorio idóneo para lograrlo".Según este trabajo de "Caudal de Extremadura. Economía, agricultura, alimentación y turismo", uno de los mayores compradores de soja del país, el Grupo "Leche Pascual", pretende que la zona norte de Cáceres sea su principal suministradora con el objetivo de que el 80 por ciento de sus compras sean de productos nacionales. El cultivo actual en el país se hace en unas 600 hectáreas, de ellas unas 300 en el municipio cacereño de Galisteo, donde en determinadas fincas se han conseguido rendimientos de hasta 4.000 kilogramos por hectáreas, y con porcentajes de proteína superiores al 40 por ciento.Se agrega que el cultivo de la soja también es "muy interesante" para las zonas productoras debido a la alta cantidad de nitrógeno orgánico que permanece en las tierras de labor.