Extremadura registra 400 nuevos casos de cáncer de mama cada año, 245 en la provincia pacense y 155 en la cacereña, según los datos manejados por el oncólogo Fernando García Urra, quien lamenta la extremeña es un de las regiones en las que menos mamografías se realizan, pese a ser la mejor forma de prevención.

Según recoge la agencia Efe, García Urra, oncólogo del Hospital Infanta Cristina de Badajoz, precisa que el cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres en la región, que lo puede padecer aproximadamente una de cada ocho, y que afecta de forma más frecuente a aquellas de entre 60 y 64 años y 70 y 84.

En su opinión, la mejor herramienta contra este enfermedad es la prevención a través de la mamografía, prueba que debe realizarse a partir de los 45 años y cada uno o dos años y que ha ido avanzando hasta detectar tumores de un centímetro, lo que ha favorecido que el 80 por ciento de las afectadas se curen.

Por ello, apuesta por la realización de esta prueba importante a la hora de diagnosticar de forma precoz una enfermedad cuya mortalidad ha disminuido y que registra una supervivencia superior al 75 por ciento.

En este sentido, la psico-oncóloga de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC), María Montejo, apunta que esta organización centra este año la campaña contra el cáncer de mama en la superación de la enfermedad con el lema Yo he superado el cáncer de mama y destaca que el programa Mucho por vivir, que ayuda a las mujeres que lo padecen con apoyo psicológico, información, testimonios y asesoramiento.

Además, añade que la AECC cuenta en Badajoz con un piso de acogida que pone a disposición de las mujeres de zonas alejadas de la capital pacense que acuden a la ciudad para someterse a tratamientos y que también realizan talleres y actividades de ocio y tiempo libre.