Los ciudadanos extremeños que trabajen en Portugal y residan en ciudades transfronterizas, como Badajoz o Valencia de Alcántara, podrán circular en sus coches con libertad y sin sufrir el acoso de la policía --como ha denunciado este colectivo que ocurría en el pasado--, gracias a los cambios introducidos por el Gobierno de ese país en la normativa que regula el régimen de admisión e importación temporal de vehículos, en concreto sobre la Ley 22-A/2007 de 29 de junio por la que se aprueba el Código de los Impuestos sobre Vehículos. Así lo transmitió ayer a este diario la Delegación Especial de la Agencia Tributaria para Extremadura para dar a conocer dichos cambios, que afectan a un colectivo de alrededor de 3.000 gallegos y extremeños que trabajan en Portugal.

La Agencia Tributaria sigue así su política de dar a conocer todos aquellos asuntos con trascendencia fiscal para los contribuyentes, según expresó un portavoz de la delegada especial, Isabel Robles. El principal cambio de la ley es el de la situación de los trabajadores transfronterizos que residen en España y se desplazan a Portugal. El nuevo régimen de admisión temporal de vehículos para circular por Portugal se plasma "en la concesión de una guía o permiso por parte de las delegaciones aduaneras del país vecino", para cuya obtención señalan una serie de requisitos y documentos.

GUIA O PERMISO Con dicha guía, los extremeños que trabajan en Portugal no tendrán que matricular su coche en ese país, como el resto del colectivo español, que llamó la atención sobre la estrecha vigilancia a la que se sentían sometidos por la policía lusa, con imposición de importantes multas, por lo que pidieron la intermediación del Gobierno español. Ahora podrán normalizar su situación.

El origen de este cambio de normativa se planteó en la última cumbre hispanolusa, donde se abordó el problema.

Los trabajadores transfronterizos podrán obtener la guía con un año de validez, susceptible de prorrogarse mientras se mantenga su situación. Los interesados deberán presentar en la aduana más próxima su solicitud aportando los comprobantes de su residencia habitual en España y del ejercicio profesional en Portugal, en el plazo de 30 días después de su primera entrada en territorio portugués.

También deberán aportar copia del libro de familia, contrato de trabajo con la última nómina --último recibo de vencimiento--, DNI, fotocopia de la documentación del vehículo, tarjeta de elector, certificado escolar de los hijos, copias de los recibos de la luz y el agua, del arrendamiento de la vivienda y una declaración de compromiso.

Los afectados que obtengan la guía estarán eximidos del pago del impuesto de matriculación de vehículos en ese país, que oscila entre los 3.000 y los 15.000 euros.