El sacerdote almendralejense Pedro Alcántara fue enterrado el pasado viernes tras fallecer en el hospital donde estuvo unas horas en coma después de sufrir una caída al acabar de oficiar una misa en los Padres. Tenía 81 años.

Don Pedro, como sí se lo conocía, celebró sus bodas de oro como sacerdote en abril con compañeros, amigos y familiares. Fue párroco en Higuera de la Real, Olivenza, Fuente de Cantos y Solana, entre otros municipios. En los últimos años fue cura en la parroquia de San Roque y oficiaba misas en Las Claras y otras iglesias.