Extremadura ha registrado ya el primer fallecimiento por gripe, aún antes de que la enfermedad infecciosa haya llegado a su fase epidémica, cifrada en 93 casos por cada 100.000 habitantes. El SES ha informado que el paciente, que ha fallecido mientras se encontraba hospitalizado, presentaba factores de riesgo a los que se sumaron complicaciones asociadas a la gripe. En estos momentos, según el Informe semanal de la Subdirección de Epidemiología de la Dirección General de Salud Pública, la tasa de incidencia en la región es de 52 casos por 100.000 habitantes. No obstante, la evolución de la actividad gripal es creciente en todo el oeste peninsular, incluida Extremadura.

Esta enfermedad afectó el año pasado a unas 23.000 personas en la región y causó 143 hospitalizaciones y 29 fallecimientos. Más de la mitad de los casos graves no se habían vacunado, a pesar de que estaban incluidos en la «población diana» de la campaña de vacunación del SES por su edad o por tener otros factores de riesgo.

Hasta finales de noviembre, más de 166.000 extremeños se habían vacunado. Entre la población de 65 años o más se habían administrado hasta esa fecha más de 117.000 vacunas, lo que supone el 53% de este grupo de edad, al que pertenecen 220.000 personas.

En el conjunto de España, hasta el pasado domingo se han notificado seis defunciones asociadas a la gripe.