Los familiares de Felipe Morquecho habían denunciado recientemente su desaparición, según han confirmado fuentes policiales. El joven solía pasar largos periodos fuera de la localidad y pensaban que se encontraba trabajando en Barcelona. Otras fuentes hablaban ayer de que había sido visto en la comunidad gallega. Los familiares intentaron localizarle hace pocos meses para comunicarle el fallecimiento de su padre. Además, según contaban los vecinos, también era necesaria su presencia para resolver asuntos de la herencia de la familia.

Unos amigos del fallecido intentaron localizarle el pasado mes de diciembre. Los jóvenes pretendían entrar en la vivienda forzando la cerradura de la misma, pero la propietaria del piso les invitó a que desistieran de su empeño. Nadie pensaba que Felipe pudiera estar muerto en su propia cama. Los jóvenes querían descartar la posibilidad de que le hubiera ocurrido algo, pero los comentarios que le situaban en otras comunidades autónomas hicieron que no prosiguieran con su búsqueda y por tanto no apareciera hasta ayer.