El crecimiento de la población en la comunidad autónoma en los últimos años se debe a la mayor presencia de ciudadanos extranjeros. No en vano del 2000 al 2006 el censo ha crecido en casi 17.000 personas, aunque el número de población española en la región ha caído en 1.800 personas en ese período.

Datos facilitados por UGT reflejan que a finales del 2006 residían en Extremadura 27.467 extranjeros con documentación en regla. Además, casi 11.000 están dados de alta laboral, según las cifras de enero de este año. Asimismo, más de 26.300 disponen de tarjeta sanitaria. Para el sindicato, existe una relación proporcionada entre tarjeta de residencia y trabajo con las medias de alta en la Seguridad Social.

La regularización llevada a cabo en el año 2005 permitió que emergieran en la región unos 1.600 empleos sumergidos, aunque UGt estima que entre 2.000 y 2.500 inmigrantes aún se encuentren en Extremadura en situación irregular.

Almendralejo acoge hoy unas jornadas organizadas por UGT para analizar la situación de la inmigración.