Tiene 17 años y dos pasiones: las matemáticas y el violín, lo toca desde los 7 años. Entre ambas andará su futuro, pero mientras se decanta, disfruta de las oportunidades que las dos le brindan, entre las que destaca viajar. La Orquesta Joven de Extremadura, a la que pertenece, le permite disfrutar y tocar en diferentes lugares y las matemáticas también le llevarán pronto a Barcelona.

Fernando Díaz Porras, estudiante de 2º de Bachillerato en el IES Hernández Pacheco de Cáceres, es el ganador de la Olimpiada Matemática de Extremadura, celebrada el 15 de enero con más de 70 participantes, y representará a la región en la fase nacional que se celebrará el próximo 31 de marzo en la ciudad condal. Junto a él también participaron otros dos extremeños que han logrado el segundo y tercer puesto en esta competición: Angel Morcillo (del IES José Manzano de Don Benito) y Jara Trujillo (IES Bioclimático de Badajoz), respectivamente.

Acostumbrado a sacar dieces en Matemáticas, en esta prueba de referencia mundial "con solucionar dos de los seis problemas que se plantean ya te puedes dar por satisfecho", cuenta, lo que muestra de la dificultad de este ejercicio. "A mí siempre me han gustado las matemáticas porque es algo abstracto, como la música. En 4º de la ESO empecé a participar en estas olimpiadas motivado también por el profesor Antonio Molano, que disfruta mucho de lo que hace y te contagia. Con él nos quedamos todas las semanas una hora extra de clase, aunque no se la pagan. Hay pocos profesores tan implicados e interesados en que sus alumnos sean buenos. Yo aprecio bastante eso, llevo tres años quedándome con él después de clase, lo hago con gusto porque nos ha enseñado cosas muy útiles, procedimientos distintos que no se ven en clase, que te ayudan a pensar y razonar y te aportan nuevos recursos", cuenta.

¿Te molesta que se cuestione a los jóvenes? "Me molesta sobre todo que haya gente que no se dé cuenta de la importancia que tiene hoy día estudiar, creo que la educación es una de las cosas más importantes en la vida y hay oportunidades para que todo el mundo, al menos, tenga una formación básica y me da pena que no las aproveche todo el mundo".

Este año se enfrentará a Selectividad y tendrá que empezar a decidir su futuro laboral, pero de momento solo tiene claro que le gustaría estudiar fuera de Extremadura, "Madrid o Salamanca serían buenas opciones" y no descarta verse trabajando en la Nasa o en alguna buena orquesta europea. "Si pudiera compaginar ambas cosas sería estupendo, intentaré no dejar nunca ni la música ni las matemáticas".