El número de fincas hipotecadas por cada 100.000 habitantes en la región durante el pasado año fue de 2.578, un 32,4% menos que el anterior, un descenso que es inferior al nacional, que fue del 40,2%.

El importe medio hipotecado ascendió en la región a los 119.878, lo que supuso una subida del 0,2% cuando en el conjunto del país bajó un 18,5%, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadísticas (Ine) dado a conocer ayer. La Rioja y Cantabria fueron las comunidades autónomas con mayor número de fincas hipotecadas por cada 100.000 habitantes, mientras que los importes medios hipotecados más altos se dieron en Madrid y País Vasco. El estudio revela además que el número de fincas hipotecadas descendió el pasado año en todas las comunidades, especialmente en Castilla-La Mancha (-54,0%) y Baleares (-49,0).