La cifra de menores implicados en la comisión de delitos experimentó el año pasado en la comunidad extremeña un ligero incremento. Fueron 1.719 los menores que en el 2005 pasaron a disposición judicial por su implicación en algún hecho delictivo, cifra que supone un 3,5% más que la registrada en el 2004, en que fueron 1.663 los menores a los que se abrieron diligencias.

Así se constata en los datos recogidos en las memorias de las fiscalías de menores de Cáceres y Badajoz, que el año pasado incoaron un total de 2.096 procedimientos penales a menores --1.508 en Badajoz y 588 en Cáceres--, y dictaron 630 sentencias --503 en Badajoz y 127 en Cáceres--, de las que el 97%, un total de 610, fueron condenatorias.

Tanto en Badajoz como en Cáceres la mayoría de los delincuentes juveniles son condenados --el año pasado en Badajoz se dictaron 491 sentencias condenatorias frente a tan sólo 12 absolutorias, y en Cáceres 119 condenas y 8 absoluciones--. Pero hay que hacer constar también que, según los datos de la jurisdicción del menor, el 45% de las condenas que se impusieron en la región, un total de 275, lo fueron por conformidad y, por tanto, no se llegó a juicio.

CAUSAS Y DELITOS En el caso de los procedimientos penales abiertos a menores el año pasado en Extremadura, el incremento se registró tanto a nivel general como en las dos provincias, algo que no ocurrió en el caso del número de menores implicados. Y es que los datos de las memorias de las fiscalías de menores también reflejan que, mientras que a nivel general sí se produjo en Extremadura un incremento, al igual también que en la provincia de Badajoz, donde además dicho aumento fue importante, un 13,5% más que en el 2004 --se pasó de 1.137 menores implicados en delitos en dicho año a 1.238 en el pasado--, en la de Cáceres, la cifra de delincuentes juveniles no sólo no aumentó, sino que descendió un 17%, pasando de 526 menores en el 2004 a 436 en el 2005.

Lo que parece, asimismo, claro es que en el último año la tendencia que venía apreciándose en Extremadura, como en otras muchas comunidades españolas, de que los menores delinquen a edades cada vez más tempranas, no se dio en esta región en el último año. Según las estadísticas, el número de adolescentes de entre 14 y 15 años a los que en el 2005 se aplicó la Ley del Menor en Extremadura fueron 782, 155 menos que los de edades comprendidas entre 16 y 17, cuya cifra se elevó a un total de 937.

Aumentan los procedimientos penales contra menores y también el número de delincuentes juveniles, pero no así la cifra de delitos cometidos por éstos. En este caso se aprecia un claro descenso, tanto a nivel general como por provincias. Así, en Extremadura los delitos cometidos en el 2005 por adolescentes de entre 14 y 17 años fueron 269 menos que en el 2004 --1.622 frente a 1.891--, un descenso que se dio también en la provincia de Badajoz --1.227 en el 2005 frente a 1.367 en el 2004-- y en la de Cáceres --395 frente a 524--.

Lo que no parece haber cambiado es el tipo de hechos delictivos que con mayor frecuencia cometen los menores, pues siguen siendo mayoritarios los de lesiones, robos y daños. No obstante, con respecto al año anterior es destacable, por sorprendente, el hecho de que los delitos contra la libertad e indemnidad sexuales cometidos por menores se multiplicaron por cinco en la provincia de Badajoz en el 2005. De los 30 registrados en el 2004 se pasó a un total de 154. En el caso de Cáceres, la cifra de estos delitos resulta ridícula si se compara con la de Badajoz, pues fueron tan sólo cuatro hace dos años y cinco el año pasado.